La delegación de Limpieza está desarrollando un Plan Especial en los imbornales con el fin de que estos estén acondicionados y funcionando correctamente cuando lleguen las primeras lluvias. Estas actuaciones se han intensificado durante los meses de verano cuando se ha acometido la limpieza de 10.197 alcantarillas en las zonas más sensibles de inundaciones, según ha explicado el concejal del área Diego López.
“Venimos de un verano muy seco y con mucho viento lo que provoca que los imbornales empiecen a llenarse de hojas y ramas, incluso de algunos residuos que hayan podido tirar los vecinos “, ha señalado el responsable municipal que ha precisado que pese a que en esta fecha los trabajos se han intensificado la ciudad cuenta “con un plan periódico que se realiza durante todo el año”.
En total hay dieciséis operarios y tres vehículos que se han encargado de la limpieza de las alcantarillas, realizándose un doble repaso e, incluso, “en muchos de estos casos de estos casos se han limpiado hasta en tres ocasiones” para que, cuando comiencen las primeras lluvias, “la capacidad de expulsión de los imbornales sea mucho mayor y esta agua pueda canalizarse de forma más rápida”, explicó el edil.
Algunas de las zonas zonas en las que se ha acometido este plan especial son Severo Ochoa con Félix Rodríguez de la Fuente, la Avenida Nabeul, la Represa, zonas puntuales en las chapas, además de los centros de Marbella y San Pedro y en Fuente Nueva, apuntó el concejal.
López ha destacado que la actuación en las alcantarillas de la ciudad es “una prioridad para no contar con dificultades indeseables por la frecuencia de la lluvia” y ha apuntado que “vamos a seguir trabajando para que los trabajos continúen en esta línea y se realicen durante todo el año”.