Luis Ángel Maté ha pasado la noche en observación tras sufrir una grave caída en la primera etapa del Tour de Polonia. El accidente, en el que también se vio involucrado su compañero de equipo Filippo Fortin, se produjo a solo 20 kilómetros del desenlace. El marbellí recibió un fuerte golpe en la cabeza que le causó una hemorragia importante. Sin embargo, el ciclista ha podido descansar bien en su primera noche en el hospital y evoluciona favorablemente.
Pese a la magnitud del impacto, afortunadamente Maté no sufrió ninguna fractura y no perdió la consciencia en ningún momento. Sin embargo se le aplicaron más de 50 puntos de sutura en la cabeza para cerrar la herida. Su compañero, tuvo menos fortuna y se vio obligado a pasar por el quirófano.
“El casco me salvó la vida. Perdí mucha sangre y lo más probable es que me tenga que quedar un par de días en observación. Ahora solo pienso en descansar, en recuperar y en volver a montar sobre la bicicleta lo antes posible”.
La caída se ha ha producido a solo 21 días del arranque de La Vuelta a España, el principal objetivo de la temporada. Pese al contratiempo, el marbellí confía en poder estar en la salida de la ronda española.