Encarnación Moreno ha sido la elegida este año por la Muy Ilustre, Venerable y Fervorosa Hermandad de Nazarenos y Cofradía Salesiana de Culto y Procesión del Santísimo Cristo de la Exaltación y María Santísima del Calvario para pregonar la Semana Santa. Mujer no cofrade pero vivida en la Semana Santa, ofrecerá una visión distinta de la Pasión y Muerte de Jesucristo. A unas horas de que proceda a su lectura, en Marbella Directo, hemos conversado con ella para conocer un poco más sobre su relación con la Hermandad y su pregón. Viniendo de fuera del mundo cofrade, la primera pregunta es obligada.
Bárbara Sánchez: ¿Cuál es el motivo para la elección de una pregonera que no forma parte de El Calvario?
Encarnación Moreno: El motivo de fondo lo desconozco, es una cuestión de Junta de Gobierno y eso no sale, pero me puedo imaginar que me han elegido porque, aunque no sea de la Hermandad, desde siempre he tenido una relación muy estrecha y todo lo que necesitan y yo puedo hacer, por supuesto, saben que me tienen siempre disponible.
B.S.: ¿Desde cuándo colaboras con ellos y en qué los ayudas?
E.M.: Desde el año que salió. Participo en la liturgia, cuando tienen que presentar actos litúrgicos echo una manilla o si tienen que hacer alguna cuestión con la administración eclesiástica.
B.S.: Dadas las circunstancias que envuelven a tu elección como pregonera, imagino que te pillaría por sorpresa.
E.M.: Sí, me pilló casi por sorpresa y casi me dio risa, me llamó Joaquín, el Fiscal, y empecé riéndome. Lo primero que le dije fue, estás de broma. Una persona que no es cofrade, que no vive la Semana Santa desde el punto de vista del incienso, de la vela, de estar debajo del capirote o del trono, ¿cómo puedo hacer un pregón? Y ahí me dieron la clave y la respuesta: seguramente lo que tú hagas será un pregón diferente a los demás y por eso te hemos elegido.
B.S.: ¿Y qué va a aportar ese pregón?¿Qué tendrá de diferente?
E.M.: Supongo que tendrá menos incienso de lo que suelen tener los pregones y lo que le falta por completo es mi experiencia cofrade porque yo no lo tengo, pero lo que le voy a aportar es el punto de vista de vivir la Semana Santa desde la celebración del misterio.
B.S. ¿Nerviosa?
E.M.: Sobre todo es el peso de la responsabilidad, para mí es una cosa muy seria y muy formal, muy comprometida. Entonces, el peso de la responsabilidad sí que lo tengo presente, nerviosa… no. Estoy acostumbrada a hablar en público, desde ese sentido no tengo ese peso escénico pero si la responsabilidad de lo que voy a hacer.
B.S.: ¿Cuando termines, ¿qué esperas que los asistentes se lleven de tu pregón?
E.M.: Quiero trasmitir a lo que voy, voy a pregonar la Semana Santa y mi intención es que cuando salgan de allí, salgan con ganas de celebrar y de vivir la Semana Santa, en todas su extensión, su profundidad y matices.
B.S.: ¿Y algo que puedas adelantar del pregón?
E.M.: El pregón va a hablar, esencialmente, de Cristo y de María, del Cristo de la Exaltación, de un Cristo Crucificado y de una Virgen en el Calvario, del paso de Maria por el Calvario, de ver al Crucificado.
B.S.: Bueno, y aunque no seas hermana, el Jueves Santo, día que procesiona la Hermandad, lo vivirás de forma especial, ¿no?
E.M.: Lo vivo en momentos previos, si estoy en Marbella no me lo pierdo y desde hace unos años hemos cogido la ‘costumbre’, que no sé si algún día será tradición, de cantar desde las escaleras de El Castillo la plegaria.
B.S.: ¿Qué momento te quedas de los que has vivido con la Hermandad?
E.M.: Difícil elegir. He vivido con mucha alegría, por supuesto, sus inicios. Éramos muy jovencitos todos, veníamos de un grupo de Salesianos y la mayoría se implicó rápidamente en la cofradía, yo es que me iba al año siguiente a estudiar fuera, entonces me parecía que iba a dejarlo cojo, pero desde esos inicios, ayudar a buscar dinero para comprar las flores, para hacer los actos, esa preocupación que les veía. El participar directamente con la Hermandad, hubo un tiempo que estuve fuera, pero cuando llegó la nueva Junta, ellos me rescataron y yo feliz.
B.S.: ¿Qué es lo que falta para que te hagas oficialmente hermana?
E.M.: Para esas cosas creo que tienes que estar tocada, tener una llamada, el día que yo siente esa llamada real, el día que yo oiga esa llamada me haré hermana. No me voy a hacer hermana por presiones ni por bien queda, yo soy como ‘prima hermana’ -bromea Encarnación mientras llegamos al final de la entrevista-.Yo los quiero muchísimo y todas las cosas de Dios tienen su momento.