Agentes de la Policía Nacional han detenido en Marbella a un joven -de 25 años y nacionalidad marroquí- por estafar más de 20.000 euros mediante compras en comercios marbellíes y malagueños. El hombre fue arrestado cuando pretendía viajar a Marruecos con los objetos que había adquirido mediante la utilización fraudulenta de tarjetas de crédito. Según las pesquisas, el investigado recurría a técnicas de delincuencia tecnológica para obtener las claves de los datos de uso bancario con los que posteriormente se cometieron las estafas. Hasta el momento, la investigación ha permitido esclarecer 14 denuncias realizadas en Córdoba, Algeciras (Cádiz), Valladolid, Toledo, Huelva Buñuel (Navarra) y Cullera (Valencia).
La investigación se originó en el mes de julio a raíz de varias denuncias relacionadas con compras fraudulentas que se habían realizado en distintos comercios de Marbella.
Tras varias indagaciones los agentes comprobaron que las compras habían sido efectuadas por un hombre de nacionalidad marroquí y residente en Marruecos. Además, los agentes averiguaron que el investigado había adquirido, en distintas ocasiones, principalmente, productos electrónicos, ascendiendo el importe defraudado a 20.000 euros.
Una vez identificado, el hombre fue detenido en la localidad gaditana de Tarifa en el momento en que se disponía a abandonar el territorio español con el material adquirido fraudulentamente.
“Phising” para obtener las credenciales de las víctimas
Según las pesquisas, el estafador envió correos masivos simulando ser de la entidad titular de las tarjetas a las cuentas de correos electrónicos de miles de personas, correos en los que se solicitaba la confirmación de los datos de sus tarjetas argumentando para ello motivos de seguridad; algunos de los titulares facilitaron sus datos personales, número de tarjeta y pin a través del enlace facilitado. A partir de ahí obtenía un sistema de pago virtual en teléfonos móviles o tabletas -sistemas virtuales que permiten, mediante la correspondiente “app” y con la numeración de la tarjeta, el código trasero “ccv” y la fecha de caducidad, realizar pagos mediante sistemas de utilización de terminal móvil-.
¿Cómo evitar ser víctimas de “phising”?
Los usuarios de la banca online debemos adoptar una serie de medidas básicas para evitar ser víctimas de phising.
Nunca ofrezcamos datos personales o bancarios por Internet, a menos que sean sitios de total confianza, asegurándonos de que la dirección de la web se corresponde con la real y que esta comienza por “https” (asegurémonos de que no falta la “s” final). Además debemos tener especial cuidado si nos redirigen hacia un enlace de alguna página que no comienza con https o carece del certificado digital, es decir, del candado que suele aparecer en la parte inferior de la barra de estado o en la parte superior de la barra de direcciones y que si pinchamos sobre él nos muestra una ventana con la descripción del certificado.
Comprobemos los certificados y recuerde que el banco nunca nos pedirá esos datos por correo electrónico. No rellenar formularios dudosos.
También debemos tener en cuenta que en las páginas a las que nos redirigen, los botones suelen ser imágenes en lugar de botones. La mejor opción es teclear directamente la dirección web en tu navegador o utiliza marcadores/favoritos si quieres ir más rápido.