El presidente de ProLiga (Comisión de Clubes de Tercera y Segunda División B), Óscar Garvín, ha enviado una carta a Su Majestad el Rey de España, D. Felipe VI de Borbón, en la que le traslada el deseo de los casi trescientos clubes asociados de que el Campeonato de España que lleva su nombre pueda ser disputado por la totalidad de los clubes que compiten en Categoría Nacional, con la única excepción de los filiales y dependientes. En la misma, el presidente resume a S.M. la corta, aunque intensa, historia de la asociación, lamenta el abandono de las categorías nacionales no profesionales por parte de los responsables federativos y expresa el orgullo que supondría participar en la competición con mayor solera de nuestro fútbol para casi cuatrocientas ciudades, pueblos y barrios de todos los confines del Reino de España.
Proliga se trata de una asociación inscrita en el Ministerio del Interior que nace con el objetivo principal de defender los intereses y velar por el prestigio profesional de los clubes de las categorías nacionales, así como su representación ante cualquier persona, entidad u organismo público o privado.
El ámbito de actuación de la CCT se circunscribe al del Estado Español, pudiendo ser miembro asociado cualquier club de los que participan en el Campeonato Nacional de liga de Tercera División y 2ªB organizado por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Desde la asociación se propone un modelo similar al inglés, que implicaría el inicio del campeonato en el mes de agosto con fases regionales que se disputarían a partido único hasta la final.
CARTA ÍNTEGRA
Su Majestad,
En primer lugar, quisiera expresarle el profundo honor que me produce dirigirme a Usted con toda la humildad y el respeto de la asociación que presido. ProLiga es una asociación creada para defender y velar por los interés de los clubes de Segunda División B y Tercera División Nacional, competiciones dependientes de la Real Federación Española de Fútbol, que representan un setenta por ciento del futbol español de Categoría Nacional y a unas cuatrocientas ciudades, barrios y pueblos del Reino de España. Por desgracia, parece que no existimos para los responsables federativos y nuestros clubes se encuentran cada vez en peor situación, como demuestra el hecho de que, año tras año, vayan desapareciendo clubes de gran historia, solera y tradición.
Perdóneme, Don Felipe, pues no es mi intención llorarle por la situación de nuestro fútbol y sí expresarle un sentimiento que he recogido a la largo y ancho de todo el territorio nacional cuando he visitado a estas entidades para que se unieran a esta asociación que agrupa ya a casi trescientos clubes en sus apenas tres años de vida. Dicho sentimiento se refiere al torneo que lleva su nombre, la Copa de S.M. el Rey. Todos los dirigentes y gestores de estos clubes coinciden en el orgullo que les produciría disputar una competición de la que fuimos apartados injustamente y sin una explicación coherente. Como sabrá, en todos los países de nuestro entorno, excepto en España, la Copa es disputada por la totalidad de los clubes que compiten en Categoría Nacional.
En nuestra humilde opinión, en estos duros momentos por los que está pasando la sociedad española, sería un motivo de ilusión y alegría que tantos y tantos ciudadanos de nuestro amado país pudieran recuperar la sonrisa y olvidar los problemas de sus quehaceres diarios, aunque solo fuera por un día. Además del impacto económico que tendría participar en el trofeo que lleva el nombre del primero de los españoles en todos esos pueblos y ciudades.
Le ruego a Su Majestad que sepa disculpar mi osadía por escribirle estas líneas, pero quería compartir mi reflexión con Usted, si no sería deseable que disputaran la Copa de S.M. el Rey todos los equipos de fútbol de Categoría Nacional del Reino de España.
Sin más, agradeciéndole el tiempo que haya podido dedicarme, se despide atentísimamente.
Óscar Garvín Esteban
Presidente de ProLiga