El pasado octubre la Delegación de Parques y Jardines del Ayuntamiento cerraba tres parques del municipio para iniciar la campaña preventiva contra la procesionaria, una oruga que suele aparecer en los pinos del término municipal. El Parque El Calvario, Vigil de Quiñones, el Polideportivo Paco Cantos y el Parque de Nagüeles, se cerraban al público para iniciar esta campaña preventiva. Cuatro meses después de estos trabajos, la oruga ha vuelto a hacer presencia y lo ha hecho concretamente en Nagüeles; muchos vecinos han alertado, a través de grupos en redes sociales, de la presencia de la procesionaria en este parque, una aparición prematura de las mismas que se debe a las altas temperaturas que estamos registrando estos meses, en un invierno con un clima más propio de la primavera, que de la estación invernal.
Irene Catalán
Esta es una de las causas principales que han propiciado que la presencia de esta oruga se adelante este año, algo en lo que coinciden desde Parques y Jardines, desde donde explicaron a este medio que “las calurosas temperaturas” que está experimentando la ciudad han propiciado que la procesionaria salga antes de sus nidos, invirtiendo así su ciclo natural; es más desde este delegación apuntan que con los tratamientos preventivos que se aplican desde octubre se tiene controlada la lucha contra la oruga, aunque según apuntan algunos afectados en sus redes, en el Parque de Nagüeles hay una presencia importante de procesionaria.
Alguno incluso transmite a través de sus redes que esta situación no solo está afectando a los usuarios del parque, sino también a las mascotas. Como ejemplo hace alusión a un perro que en el Parque Canino de Nagüeles, estuvo a punto de ingerir una de estas orugas