El máxime de la política debe ser el de trabajar por y para el ciudadano, una premisa que parece ser que, en el caso de algunas asociaciones de vecinos de Marbella y San Pedro, no se está dando. El colectivo vecinal ha sido protagonista en las últimas semanas por diversas discrepancias con el actual tripartito, y la última verse afectada por esta situación ha sido la de Aires del Sur y el resto de colectivos que desarrollan sus actividades en el Centro Social Polivalente Azucarera de El Ingenio, entre los que también se encuentran la AAVV Julio Romero de Torres. Las asociaciones que allí se ubican están a la espera de que el actual tripartito ejecute las obras de acondicionamiento del local que fueron aprobadas por la anterior alcaldesa, Ángeles Muñoz, y que contemplaban, tanto las mejoras de las instalaciones como las fachadas del edificio con un patio de acceso en la planta baja, un distribuidor, sala de mayores, una sala de usos múltiples y un aula de música. Un embellecimiento completo y necesario del inmueble que, según explicó a este medio la presidenta de Aires del Sur, Alicia Rodríguez, tras haber mantenido varios encuentros con el Teniente de Alcalde de San Pedro, Rafael Piña “no cumplen con lo que se prometió, no nos dan ninguna solución y no nos dicen cuando empezarán las obras”.
De hecho asegura que el motivo al que alude Piña para el no inicio de las mismas es que “no existe local para trasladarnos, aunque sabemos que hay locales y lo único que nos ofrecen es irnos a la Carpa situada en el antiguo Recinto Ferial, algo que no es viable para nosotros por el tipo de actividades que desarrollamos”.
Y es que lo que más le preocupa a este colectivo vecinal es la impartición de sus clases, que van desde zumba a pilates, pasando por bachata, unas actividades que esta misma tarde comenzarán a dar después de que hayan decidido quedarse en el edificio “hasta que nos den una solución y nos den otro local; lo que no podemos hacer es dejar de impartir las clases, cuando ya hay personas que las han pagado”, lamentaba la presidenta vecinal.
Es tal la indignación de este colectivo que no descartan movilizarse, con el apoyo de la AAVV Julio Romero de Torres, para exigir el inicio de estas ansiadas obras y el traslado a un local que se adecue a sus necesidades mientras se ejecutan las actuaciones de mejora, unas obras que contemplan también una oficina de gestión, sala de baile y sala de usos múltiples y dos salones para uso de las asociaciones.