Al fin volvió el gol y eso sirvió para que la U.D. San Pedro se apuntara su 17ª victoria de la temporada, un triunfo ante el Antequera C.F. (0-2) que le vuelve a meter de lleno en la lucha por disputar la liguilla de ascenso a 2ª División B. Tras 484 minutos sin ver puerta, los rojinegros rompieron una racha que le ha alejado durante algunas jornadas de su principal objetivo, pero que Juanfri se encargó de acercar de nuevo, firmando un doblete que da vida a los sampedreños.
Redacción
Los de Adrián Cervera se presentaron en el Municipal de El Maulí con dos novedades en el once inicial, una de ellas muy sorprendente a primera vista. Rafa Muñoz, indiscutible durante toda la campaña, desapareció de una convocatoria de 17 futbolistas, siendo el jugador descartado por el técnico marbellí. Su lugar en el lateral derecho fue ocupado por el malagueño Juanjo y Eloy, ya recuperado de sus dolencias físicas, entró en la media punta, por detrás de Juanfri.
Con ese dibujo, los rojinegros comenzaron siendo los dueños del esférico en los primeros compases, impidiendo a los antequeranos pisar el campo rival.
Nada de interés sucedió hasta que en el minuto 6 se dio por finalizada la sequía goleadora de los sampedreños, en una llegada por banda izquierda de Pedro. El murciano puso el balón en el área y allí apareció Juanfri para rematar en el primer palo, sorprendiendo a Lara, que nada pudo hacer para evitar el 0-1.
El tanto sirvió para soltar todo el estrés y la tensión de una larga agonía, que se alargó durante cinco partidos, dejando tocados a los locales, que no comenzaron a reaccionar hasta rebasado el minuto 20.
Ese primer acercamiento de los verdiblancos al área de Javi Muñoz fue protagonizado por el lateral derecho Óscar, aunque su lanzamiento se perdió muy desviado. Poco a poco, los hombres de Juan Carlos Cuevas fueron ganando en intensidad, teniendo su mejor ocasión al filo de la media hora, con un gran disparo del centrocampista Marco, emergiendo la figura de Javi Muñoz, que envió el esférico a saque de esquina. Eso fue lo más peligroso de los locales durante la primera mitad.
A pesar de no desplegar un juego brillante y fluido, los sampedreños pudieron llevarse una renta más amplia al descanso, si Oli no se hubiese topado con un defensor, en el minuto 37, que le sacó bajo palos un gran cabezazo, tras un saque de esquina botado por Félix.
La última acción de peligro de la primera parte llegó en el minuto 41 y también tuvo color rojinegro. El reaparecido Eloy se inventó un magnífico eslalon, marchándose de todo el que salía a su paso, pero Mauri no pudo finalizar con éxito la jugada. Con esa renta mínima para los sampedreños se llegó al tiempo de descanso, momento que sirvió para que el técnico local diese entrada a dos futbolistas. Isco y Henares, dos jugadores más verticales, ocuparon el lugar de Marco y Maero, en un intento de buscar la igualada.
Afortunadamente, la recta final del partido sólo tuvo un dueño y a ello contribuyó la salida al campo de Borjita, en sustitución de un incombustible Domingo. El centrocampista rojinegro se marcó quince minutos a un gran nivel y regaló el tanto de la sentencia a Juanfri, en el minuto 82, en una jugada plena de fe y calidad. El sampedreño fue más listo que el defensor rival y le robó la cartera, poniendo un centro medido sobre la cabeza del fuengiroleño, que no perdonó el 0-2 definitivo.