Con este proyecto se evitan manchas en el pavimento del municipio, así como los posibles resbalones que pueda ocasionar a los viandantes
Desde el pasado mes de enero, numerosos operarios del Ayuntamiento de Marbella en consonancia con la Delegación de Limpieza han puesto en marcha la campaña de eliminación de la naranja. Prevista hasta finales de febrero, el objetivo de este proyecto no es otro que la conservación de la estructura y buen estado de todos los naranjos de la ciudad.
Cuando las naranjas llegan a su punto máximo de maduración, éstas caen al suelo, produciendo importantes manchas. Con el fin de evitar esta problemática, así como posibles accidentes o caídas derivadas del pisoteo de esta fruta, se lleva trabajando ya varias semanas en ello. Según apunta el concejal del rango, Eloy Ortega, se trata de una «tarea ardua» que cada año conlleva un mes y medio aproximado de trabajo puesto que debido a los días de lluvia el proceso se ve ralentizado.
En total, más de 1.800 naranjos dispersos por toda la ciudad verán mejorado su aspecto, lo que supondrá la eliminación de unos 84.000 kilogramos de fruto que serán llevados al vertedero pues, según apunta Ortega, su aprovechamiento se ve imposible al tratarse de naranjas agrias.