El Ayuntamiento de Marbella y las principales distribuidoras de agua de la Costa del Sol advierten que de no cumplirse las expectativas de reducción del caudal del 20 por ciento exigidas por la Junta de Andalucía deberán imponerse restricciones más severas en los domicilios de los ciudadanos
La Junta de Andalucía ha impuesto tanto a los diferentes Ayuntamientos de los municipios de la Costa del Sol como a las principales distribuidoras de agua, Acosol e Hidralia, numerosas medidas que deberán cumplirse para combatir la grave situación de sequía que actualmente vive la zona.
Así, desde la pasada semana, algunas acciones que anteriormente eran cotidianas, como el baldeo de calles o el riego de jardines, quedan totalmente prohibidas con el fin de conseguir un objetivo claro: reducir el caudal a un 20 de por ciento. Cabe destacar que distintas operadoras que trabajan para Acosol y que son las encargadas de la distribución del agua a los domicilios y urbanizaciones, tienen instrucciones de que, en aquellas zonas en las que se certifique que algunas de las medidas impuestas no se estén aplicando, se corte el suministro o se reduzca el abastecimiento.
En este sentido, desde que estas normas entraran en vigor, los diferentes actores de este proceso, esto es los Consistorios y las distribuidoras de agua están celebrando sendas reuniones con la finalidad de recabar datos y medir resultados. De esta forma, estos agentes advierten que, pasado un tiempo y en el hipotético caso de no ser suficientes estas medidas para cumplir con lo exigido por el Gobierno andaluz, deberán llevarse a cabo otras restricciones más severas que afectarían directamente a los domicilios, como es la reducción de la presión del agua en las viviendas.