El Partido Popular tiene ya la mente puesta en las próximas Elecciones Generales que tendrán lugar el 26 de este mes, una nueva jornada electoral en la que el país se debatirá entre “dos modelos, dos diferencias claras en cuanto a posible formación de Gobierno, una será la de Podemos, dependiendo si le dan las matemáticas, y otra será la del PP”, así lo explicó Ángeles Muñoz, concejal y líder de la formación popular en Marbella y que opta a revalidar su plaza en el Senado como ya logró el pasado 20 de diciembre, cuando la líder popular llegó a superar el apoyo que recibió la candidatura al Congreso de los Diputados de su formación. La campaña electoral vendrá marcada por ser “austera y pegada a la calle, hablando directamente con la gente”, señaló Muñoz, quien se siente cómoda en el trato directo con los ciudadanos, que empatizan bien con la líder popular. Un país que se debate entre dos opciones de futuro, un discurso que ha quedado refrendado si tenemos en cuenta lo ocurrido durante las negociaciones para la formación de Gobierno que siguió a las pasadas elecciones.
B. Sánchez
“Es importante que todo el mundo vaya a votar y creo que va a haber muchas personas que van a meditar su voto porque vieron donde fue a parar cuando votaron a otras formaciones políticas”, no en vano, lo que en un primer momento se intentó vender como una llave de Gobierno que apoyaría la investidura de Rajoy -la candidatura de Albert Rivera al frente de Ciudadanos-, terminó firmando un pacto con el socialista Pedro Sánchez para buscar un acuerdo de Gobierno.
Un pacto del que se desmarcó el podemita Pablo Iglesias, quien no está dispuesto a sentarse con Rivera. Una situación que, ante el nuevo escenario político que se predice lejos del bipartidismo, dejaría como opciones de Gobierno al pacto entre la formación socialista y Podemos, sin que Rajoy cuente con otro apoyo, tal y como ya se encargó de señalar el líder de Ciudadanos.
Una lucha por tanto en la que se debaten Ciudadanos y Podemos por ser la llave que termine abriendo la puerta de la Moncloa a Pedro Sánchez, si bien, la formación morada pugna por alzarse como primera opción del espectro político de la izquierda, adelantando a la formación de la rosa.
En este sentido, Esperanza Oña, vicepresidenta del Parlamento de Andalucía, incidió en que “se está jugando con dos modelos de futuro, un modelo en el que sigue la democracia, los derechos de las personas, sabemos a que atenernos, tenemos seguridad jurídica, tenemos un gobierno que respeta a la Unión Europea y que respeta los acuerdos internacionales, y la alternativa que sería un gobierno de PSOE más podemos, parecido a Grecia, de la que ya van presumiendo menos, donde se han recortado un 30% las pensiones, donde se pueden sacar 20 euros del banco como máximo, o como Venezuela donde no hay pañales para los niños, no hay papel higiénico, no hay medicamentos para los enfermos, no hay gasolina para las ambulancias”. Un planteamiento que la popular cerraba preguntando si “¿Queremos eso?”.
Oña quiso aclarar que aunque Podemos se presenta como una novedad en el marco político, promueven una ideología que cuenta ya con un amplio bagaje en otros puntos del mundo, “no pensemos que Podemos es lo nuevo, Podemos es lo antiguo, lo que ya ha fracasado en todas partes, es volver a lo que ya se le ha dicho en todo el mundo que no vale”.