Los votos de los catorce concejales conseguidos por el Partido Popular en las pasadas elecciones municipales han servido a Ángeles Muñoz para ser investida como alcaldesa de Marbella por cuarta vez. El resto de los votos han sido doce en blanco y una abstención.
En su primer discurso tras ser elegida como alcaldesa, Muñoz ha realizado un llamamiento para “contar con el apoyo del resto de formaciones”. La regidora valoró además las posibilidades que ofrece un “gobierno de estabilidad”, tras conseguir una mayoría en “un contexto de fragmentación”, en una legislatura que entiende como “una gran oportunidad”.
Muñoz ha defendido además la “lealtad institucional” para conseguir “acuerdos con otras administraciones” y se ha comprometido a demandar lo que Marbella merece tanto “al Gobierno Central como a la Junta de Andalucía”. En relación con el primero, la flamante alcaldesa adelantó su interés por continuar apostando porque el litoral del municipio cuenta con los ansiados espigones, mientras que a la administración andaluza reclamará la larga lista de obras e inversiones pendientes del anticipo reintegrable, entre los que referenció los centros de salud, educativos, la residencia de mayores o la Ciudad de la Justicia.
La elaboración del Plan General de Ordenación Urbana fue una de las “prioridades” que se marcó la alcaldesa quien pidió un documento que nazca fruto del “consenso”. “La justa reivindicación de bienes y derechos de procesos judiciales por corrupción” fue otras de las cuestiones en las que Muñoz aspira a seguir profundizando, “defenderemos lo que es nuestro allá donde sea necesario”.
En relación con San Pedro, “la descentralización administrativa y presupuestaria” fue uno de los compromisos de la primera edil que terminó su intervención destacando que se trata de “cuatro años importantes en logros para la ciudad” y que inicia esta nueva legislatura “convencida de que juntos podremos lograrlo”.