Malestar y fisuras entre los socialistas por la estrategia agresiva contra Ángeles Muñoz, que achacan a la excesiva influencia sobre el líder local de Sonia Pérez y Juan Carlos Angulo, la falta de proyecto propio y el hecho de que el partido no valore a los afiliados de toda la vida
Las primeras discrepancias surgieron hace unos meses, cuando el PSOE local comenzó a seguir a pies juntillas los dictados de Moncloa para convertirse en cómplice de la campaña de acoso contra la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, a pesar de que la Fiscalía y los jueces en la Audiencia Nacional dejaban claro que no había ni el más mínimo indicio de todas las acusaciones vertidas por el Gobierno de Pedro Sánchez que vincularan al Ayuntamiento ni a la regidora con ninguna trama delictiva y, sobre todo, al darse cuenta del daño que esa estrategia agresiva, con todos los medios afines, ha causado -y lo sigue haciendo- a la imagen de la ciudad. La fractura que estos hechos han venido generando ha desembocado en una importante división en el partido que se ha agravado con los movimientos de poder interno y con la elaboración de la lista electoral por parte de José Bernal. Fuentes socialistas aseguran que el líder local se encuentra “excesivamente influenciado por una camarilla en la que la voz cantante la llevan Sonia Pérez y su marido, Juan Carlos Angulo, que han creado una camarilla hermética cuya única obsesión es la alcaldesa y se han despreocupado de todo lo demás”. “Se han olvidado de los afiliados de toda la vida, a los que no valoran ni su trabajo ni sus opiniones, y de los simpatizantes y vecinos a los que no hemos presentado un proyecto propio para estas elecciones municipales”, lamentan.
El malestar y las fisuras en el seno de la formación se han agudizado con la inclusión en la lista electoral de Iman El Akel, considerada la mano derecha en España del primer ministro de Marruecos, y cuya incorporación a la candidatura respondería a una imposición de Pedro Sánchez para contentar al Gobierno del país vecino. “No se entiende cómo hay afiliados que venimos trabajando desde jóvenes por el partido en Marbella y en San Pedro y ahora se premia y se hace más caso a Sonia y Angulo, que vienen de Salamanca, y a esta chica que viene de Marruecos”, denuncian otras fuentes, que aseguran que “somos muchos los que no nos sentimos identificados con la campaña que se está haciendo, ni con el rumbo que está tomando el partido; tampoco con la actitud de Pepe, que no parece escuchar a nadie salvo a este grupito que no tiene propuestas para la ciudad y que no sabemos a dónde nos va a llevar”.
