Las noches de Starlite Catalana Occidente están diseñadas para dejar sin palabras. Y una noche más, el festival boutique más importante de Europa lo ha conseguido. En esta ocasión ha sido con un concierto único e irrepetible en la historia de la música, porque reunió sobre el mismo escenario al astro del jazz latino Chucho Valdés y a un buen ramillete de amigos del mundo de la música, en lo que fue un canto a la vida, una oda a la alegría y un homenaje a la música.
Pablo Milanés, Pancho Céspedes, Javier Ojeda, Efecto Mariposa y la joven promesa Cimafunk, -junto al cuarteto que habitualmente acompaña a Valdés- fueron los invitados de esta fiesta musical dedicada en exclusiva a los incondicionales de Starlite Catalana Occidente, donde la química sobre el escenario estaba desde el inicio asegurada.
A sus 80 años, el Sr. Valdés ha ofrecido al público de la cantera de Marbella la obra más ambiciosa de su carrera: «La Creación», una suite de tres movimientos, inspirada en los santos y las historias de la religión afrocubana comúnmente conocida como Santería, donde utiliza muchos de los cánticos en lengua yoruba, y algunos en español, fusionados con jazz, con música africana, con ritmos caribeños puros y con el blues.
Entre el repertorio, los grandes temas de cada uno de los artistas amigos invitados, un popurrí de hits de sobra conocidos por el gran público que hizo las delicias de los asistentes. El espectáculo daba comienzo con Chucho Valdés al piano acompañado de su banda, embrujando a los asistentes con la pureza de su música. «Rumbón», «Lorena’s Tango» dedicado a su mujer argentina Lorena o «Armando’s Rhumba» eran sólo el comienzo de una noche que prometía.
Sus amigos comenzaron a acompañarle al escenario como Efecto Mariposa, con quien interpretó «Por quererte» o «No me crees», también con Javier Ojeda de Danza Invisible, asiduo como público al festival, y quien aseguraba sentirse como en casa.
Numerosos fueron los momentos que quedarán marcados en la historia de Starlite Catalana Occidente por la singularidad de su carácter. Un símbolo de la canción mítica cubana, el cantante y compositor Pancho Céspedes subió muy emocionado al escenario para interpretar «Perla Marina» a piano y voz. Le siguió «Vida loca» con la que sendos artistas se dejaron llevar por el entusiasmo de la noche e hicieron disfrutar al público de un momento mágico sobre el escenario.
La emoción se hizo palpable cuando «uno de los más grandes, sino el más grande; amigo e ídolo de Cuba» Pablo Milanés, pisaba el escenario para deleitar a los presentes con «Distancias» y «Para qué» a piano y voz. Con la sensibilidad in crescendo, tuvo lugar un momento histórico: el encuentro sobre el escenario de tres cubanos míticos, Chucho Valdés, Pablo Milanés y Pancho Céspedes. Tres maestros compartiendo «La Felicidad» al público de Starlite Catalana Occidente, que muy agradecido valoró el regalo con un interminable aplauso.
Los grandes artistas dieron el testigo a la joven promesa de la música cubana, Cimafunk que interpretó «Salvaje» repleto de entusiasmo con su mentor al piano.
Una fiesta de estas características, de celebración de 80 años de vida y 60 de trayectoria musical como referente del jazz latino en todo el mundo, tenía que contar con una despedida y cierre por todo lo alto. Con todos los artistas sobre el escenario, derrochando alegría y talento, celebraron el final de una noche inolvidable para todos interpretando juntos «Bacalao con Pan», derrochando su pasión por la música. «Estamos súper felices de estar aquí en Starlite, un lugar incomparable, maravilloso y muy especial», compartía el cubano muy emocionado rodeado de sus amigos y con la misma ilusión del primer día.
Entre los asistentes, la alcaldesa de Fuengirola Ana Mula y Agustín Bravo, disfrutaron de una de las noches más especiales del festival boutique más importante de Europa.
