A principios del mes pasado el Ayuntamiento decretaba el cese de la actividad en el Club de pádel y tenis El Mirador de Marbella, momento en que las instalaciones se veían abocadas a cerrar después de auto judicial que daba al Consistorio el plazo de cinco días para decretar el cierre del club. Pero para entender esta decisión hay que remontarse a hace algunos años atrás, cuando un vecino de una urbanización colindante a este club deportivo presentaba una demanda al considerarse perjudicado por el ruido de las pistas deportivas; en este punto el Ayuntamiento también era parte demandada por no haber adoptado las medidas oportunas para el cese del ruido procedente del club.
Así, nos trasladamos a septiembre de ese año donde se emitía un auto -anterior al de diciembre- en el que el juez solicitaba un informe al Ayuntamiento sobre si el club había tomado las medidas paliativas tendentes a reducir el ruido que soportaba el vecino, sin que la inspección pudiese constatar que se hubiese tomado ninguna medida al respecto, según explicaban desde el Consistorio mediante un comunicado.
Hoy, en Junta de Gobierno Local, se ha aprobado el decreto de acatamiento de la sentencia emitida por el juez el pasado 3 de diciembre que obligaba el cese de la actividad del club, y precisamente ayer, desde el Club mostraban, a través de sus redes sociales, que habían concluido la obra de instalación de una pantalla acústica, y que además se había entregado la documentación pertinente para que pudiera llevarse a cabo su reapertura.
De momento, el Club El Mirador tendrá que esperar a que las autoridades competentes den una respuesta al respecto. “Esperamos y deseamos que este trámite se agilice y despertemos de esta pesadilla en la que estamos inmerso y que está costando el puesto de trabajo a gran parte de la plantilla que formaba este club”, subrayaban desde el club.