José Eduardo Díaz, teniente de alcalde y concejal de Urbanismo: “Hoy Marbella es ejemplo de gestión urbanística responsable. Construimos futuro desde la ley y el respeto al entorno”
Marbella ha dejado definitivamente atrás su etapa más oscura en materia de urbanismo. Tras años marcados por la desregulación, el caos jurídico y los intereses especulativos, la ciudad ha consolidado un nuevo modelo urbanístico sostenible, planificado, legal y respetuoso con su entorno natural, que ya está dando resultados visibles y reconocidos.
El Ayuntamiento, con una firme apuesta liderada por el área de Urbanismo, ha convertido el urbanismo en una herramienta al servicio de la ciudad y no al revés, apostando por un crecimiento responsable, equilibrado y adaptado a los retos actuales de sostenibilidad y habitabilidad.
“Hoy Marbella es un referente de gestión urbanística responsable en Andalucía. Hemos pasado del urbanismo caníbal al urbanismo que piensa en las personas y en el territorio. Y lo hemos hecho con determinación, legalidad y visión de futuro”, ha afirmado José Eduardo Díaz, teniente de alcalde y concejal delegado del área.
Una planificación que protege, ordena y avanza
La gran transformación urbanística de Marbella se sustenta en una nueva forma de entender el desarrollo de ciudad. La tramitación avanzada del nuevo Plan General de Ordenación Urbana, adaptado a la Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA), marca un antes y un después.
“El nuevo PGOU no es solo un documento técnico, es la hoja de ruta para garantizar seguridad jurídica, equilibrio ambiental y coherencia urbanística. Hoy planificamos a largo plazo, con transparencia y con participación”, ha subrayado Díaz.
Esta planificación permite impulsar nuevos desarrollos residenciales sostenibles, recuperar zonas degradadas, mejorar la accesibilidad, proteger el patrimonio natural y generar oportunidades sin hipotecar el futuro.
Proyectos que materializan el nuevo urbanismo
Entre los hitos más recientes, destacan:
•Transformación de espacios obsoletos en zonas habitables y modernas, como en Arroyo Primero o Nueva Andalucía.
•Protección y puesta en valor de entornos naturales, como las Dunas de Artola y la red de parques urbanos.
• Mejora de la movilidad sostenible, con sendas peatonales, integración de la senda litoral y viales humanizados.
• Impulso a proyectos residenciales de baja densidad y alta eficiencia energética, con exigencias claras a promotores en materia medioambiental.
“Cada proyecto que aprobamos lleva consigo una visión de ciudad. Aquí no se improvisa, aquí se construye futuro”, ha declarado José Eduardo Díaz.
Legalidad, sostenibilidad y recuperación de la confianza
El teniente de alcalde ha recordado que uno de los grandes logros del Ayuntamiento ha sido recuperar la confianza institucional, tanto de ciudadanos como de inversores, gracias a una política urbanística clara y coherente. Marbella es hoy una ciudad que garantiza seguridad jurídica, que aplica la ley con rigor y que defiende su modelo territorial frente a los errores del pasado.
“Durante años, Marbella fue el ejemplo de lo que no debía hacerse. Hoy, es justo lo contrario: somos ejemplo de cómo se puede redirigir un modelo fallido hacia un urbanismo moderno, legal y comprometido con su gente y su entorno”, ha afirmado Díaz.
Urbanismo como motor económico y social
La nueva etapa urbanística también se traduce en actividad económica, generación de empleo, atracción de inversión responsable y mejora de la calidad de vida de los vecinos. Marbella no renuncia al crecimiento, pero lo hace desde la planificación, la normativa y la sostenibilidad.
El Ayuntamiento trabaja además con herramientas avanzadas como la digitalización completa del área urbanística, control con drones, sistemas GIS y atención ciudadana ágil y transparente.
El urbanismo ya no es en Marbella sinónimo de escándalo, sino de gestión moderna. Y en palabras de su responsable, José Eduardo Díaz:
“Hemos devuelto el prestigio al urbanismo de Marbella. Ahora es sinónimo de orden, sostenibilidad, rigor y progreso. Y vamos a seguir por este camino, con seriedad, profesionalidad y visión de ciudad.”
Marbella construye, pero construye bien. Porque el futuro se levanta sobre cimientos sólidos. Y hoy, esos cimientos se llaman legalidad, sostenibilidad y buen gobierno.