El primer equipo del Trocadero Marbella viaja el domingo al Puerto de Santa María, para enfrentarse al C.R. Atlético Portuense. Un difícil partido, para ambas escuadras, en el que los marbelleros esperan, que todo el revuelo del embargo, no les afecte y puedan volver con un resultado positivo. Por lo pronto, ante la falta de liquidez que tiene el club y para evitar, que el equipo tuviera que viajar en sus propios coches, un grupo de veteranos y exjugadores del club, han hecho una colecta y han asumido el coste de este viaje. En lo estrictamente deportivo, ambos conjuntos han tenido un comienzo de año, muy dispar. Los gaditanos atraviesan una mala racha, en la que solo han podido sacar un empate en casa y dos derrotas, en sus visitas a equipos de la capital del estado. Por el contrario, los costasoleños han obtenido una derrota, en su visita a Madrid al segundo clasificado y sendas victorias en casa, donde esta mostrándose muy fuertes.
Redacción
El partido tendrá lugar en el Polideportivo Municipal del Puerto de Santa María a las 12:30 h., con la dirección arbitral de la mejor arbitro del mundo 2016, Alhambra Nievas.
Un día antes, en la jornada del sábado, los más pequeños del club, tienen su concentración mensual de “escuelitas” de rugby. En esta ocasión y organizado por el C.D. Universidad de Granada, viajaran a la ciudad de la Alhambra. El Trocadero Marbella va a viajar con una decena de equipos de categoría Sub12, Sub10, Sub8 y Sub6, con más de 150 participantes, entre jugadores (chicos y chicas de entre 5 y 11 años) y técnicos.
Obviamente, tampoco hay dinero para que las más jóvenes promesas del club, puedan viajar en autobús. De nuevo, tendrán que ser los padres quienes tengan que poner dinero de sus bolsillos y evitar, el caos organizativo que sería, que viajaran más de 120 chavales, con sus familias en sus propios vehículos.
Esperemos, que la próxima semana, podamos solo hablar de los éxitos de nuestros deportistas, de sus equipos y sobre todo, que entre todas las partes implicadas, se encuentre una solución, para la delicada situación por la que estamos atravesando.