Vuelta a las andadas con los campos de entrenamiento. El Marbella no ha podido entrenar hoy en Cártama y no es la primera vez que ocurre desde la llegada del nuevo entrenador David Movilla. El técnico vasco se ha visto obligado a desarrollar hoy la sesión en el José Burgos Quintana de Coín a una hora inusual para un entrenamiento.
El Marbella está viviendo un calvario para completar la semana de entrenamientos previa a la jornada. El equipo ha vuelto a pisar en varias ocasiones el Luis Teruel para entrenar en Césped Artificial ante la imposibilidad de trabajar en Cártama. Tras solucionarse los impedimentos en la instalación por las tarea de resiembra, el Marbella volvió a la «normalidad» con el Puma de Lerma en los campos PFC Costa del Sol de Cártama el pasado 05 de noviembre. A partir de ahí, se esperaba no volver a tener más cambios. Algo que no ha ocurrido como tal.
David Movilla completó su primera sesión de trabajo con la plantilla el pasado 12 de noviembre en Cártama, pero desde entonces el equipo se ha visto obligado a trasladarse. Por desgracia, Movilla ya conoce para trabajar el Luis Teruel y ha tenido que completar varias sesiones en césped artificial.
El técnico vasco se ha topado rápido con la cruda realidad que rodea al Marbella. La precariedad es protagonista en el trabajo diario de los blanquillos y prueba de ello ha sido la sesión de este martes. La instalación del PFC Costa del Sol no ha estado disponible en el día de hoy y la plantilla se ha visto obligada a entrenar en el maltrecho césped del José Burgos Quintana. No es la primera vez que se quedan sin la opción de entrenar en Cártama desde que está Movilla y además, en cada ocasión tampoco pueden completar la sesión en gimnasio al no disponer de este medio ni en Coín ni en el Luis Teruel. Además, para más inri, el entrenamiento no ha podido desarrollarse hasta las dos de la tarde. Aunque Cártama es la instalación más completa de la que dispone el Marbella, no dispone de vestuarios.
El Marbella lleva varias temporadas sin anunciar el plan semanal de entrenamientos a lo no poder conocer con antelación la disposición de campos, algo que trastoca bastante a la organización de la plantilla y el cuerpo técnico.
El Marbella está sufriendo mucho más en materia de entrenamientos respecto al curso anterior en el que por estas fechas no había pisado aún el Luis Teruel.
El principal inconveniente de Coín radica en la falta de mantenimiento del verde, algo de lo que no puede hacerse cargo el Ayuntamiento. La instalación estuvo gestionada en su día por Football Impact y ahora se encarga PFC Costa del Sol. Es la única alternativa que ofrece la empresa cuando no está disponible Cártama y el estado del césped es peligroso en materia de lesiones.
El equipo ha trabajado hoy en Coín y mañana se desconoce cuál será el escenario para preparar la sesión a tres días para afrontar el duelo decisivo de este sábado en Sevilla ante un rival directo en la lucha por salir del descenso (18:30 h).
El club amplió la estructura con la contratación de Bernardo Espinosa como director general que ha llegado a contemplar la opción de entrenar en el Roberto Osborne (campo del Marbella Rugby Club), opción que por el momento no ha avanzado. La desesperación es máxima por parte de jugadores y cuerpo técnico, aún en el mes de noviembre, con bastante calendario por delante.
El aplazamiento del Marbella FC-Atlético Madrileño, en el aire
El Atlético Madrileño ha propuesto varias fechas, sin llegar a acuerdo por el momento con los blanquillos. Los de Fernando Torres estaban dispuestos a jugar en el día de hoy el partido, propuesta que no ha aceptado el Marbella. De momento, no hay acuerdo entre ambos equipos y de seguir así la situación, será la Federación la que tenga que postularse. La idea del ente federativo es la de jugar el encuentro antes de que finalice el año.
