Marbella cuenta con uno de los parajes más emblemáticos de la naturaleza como son las dunas de Artola, de ahí que su preservación sea esencial. Por eso, el candidato número 5 de la lista del PP por Málaga al parlamento andaluz, Félix Romero, anunció hoy que si su partido gana las elecciones autonómicas del próximo 22 de marzo y gobierna en la Junta, impulsará un proyecto para que todo el sistema del cordón dunar de Marbella sea una reserva ecológica. Esta calificación, recogida en la propia legislación andaluza y de acuerdo a un estudio técnico en el que ya se está trabajando, permitiría, según explicó Romero, recuperar dunas en zonas que ya están degradadas o la puesta en marcha de acciones que permitan al ciudadano disfrutar de este paraje natural “sin una intervención agresiva”. Y es que las dunas de Artola es un área que debe protegerse, al contar con “especies endémicas que sólo se dan en estas dunas”; por ello, Romero ha sellado hoy este contrato con la Asociación Pro Dunas Bahía de Marbella, una entidad que ha trabajado y trabaja por la preservación de la zona, el mayor espacio dunar que subsiste en la provincia de Málaga.
Irene Catalán
De hecho, se va a realizar una más que importante actuación sobre las mismas después de que el pasado febrero, el Ministerio de Medio Ambiente adjudicara las obras de unas actuaciones que comprenden la construcción de un camino peatonal perimetral que, a modo de paseo, discurrirá por la franja de servidumbre de tránsito rodeando el borde superior del sistema dunar.
El objetivo del camino es impedir el acceso de vehículos a las dunas y regular el paso peatonal. Asimismo, se construirán pasarelas de madera para permitir el acceso desde este paseo perimetral hacia la playa sobre algunas veredas existentes para no degradar más la zona.
Además, aprovechando la existencia de la Torre Ladrones, declarada Bien de Interés Cultural (BIC), se continuará el paseo perimetral hasta rodearla. También se colocarán bancos y papeleras de madera a lo largo del paseo, se eliminará la mayoría de las veredas que se han creado a lo largo del tiempo por el tránsito desordenado de vehículos y peatones, y se quitarán antiguos pavimentos.
Según el proyecto, que comprende 1,7 millones de euros, se aprovechará como aparcamiento el pavimento bituminoso que se utiliza actualmente como tal cerca de la Torre Ladrones y se habilitarán dos nuevas áreas para estacionar en los extremos de la zona de protección.
