Miércoles Santo. Pasión, emoción y fervor incontenible para sus devotos con un protagonista claro, El Nazareno. Cofrades, penitentes y marbellíes han sido un año más testigos de la incomparable relación del Cristo y la localidad, un encuentro en el que El Nazareno ha bendecido a Marbella y Marbella ha bendecido al Nazareno. Puntual a su cita, la Agrupación Musical de La Pollinica y la Banda de Cornetas y Tambores de la Archicofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno del Paso y María Santísima de la Esperanza de Málaga, lo han acompañado, junto a las mantillas y a los 225 nazarenos, ataviados con ese inconfundible color morado de sus ropajes. La imagen ha recorrido las calles más emblemáticas de la localidad, partiendo desde la Iglesia de la Encarnación, punto neurálgico de la Semana Santa, con un Nazareno donde la devoción de sus feligreses ha sido la protagonista. Con la cruz a cuestas sobre su hombro izquierdo, claveles rojos y una multitud tras él, El Nazareno ha hecho sentir a los allí presentes un verdadero momento de recogimiento, que guiaba a su madre, la Virgen María Santísima del Mayor Dolor y Santo Sepulcro. Sufrimiento en su rostro, con una música de doliente interpretada por la Banda Municipal, la Titular seguía los pasos de su hijo, por-tada por sus 120 hombros de trono, que acompasaban su paso al del desfile procesional, junto a las mantillas. Cuando la Virgen partía de su templo se vivía uno los momentos estelares de la noche, la intervención de la cantante de copla, Diana Navarro, que ha entonado una emotiva saeta al paso del trono en su desfile procesional. Instante que se ha repetido momentos después con otro canto, esta vez dedicado al Cristo.
Redacción
La comitiva formada por la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, así como distintos miembros del equipo de Gobierno, no han querido abandonar al Cristo y su Madre en su recorrido por las calles más emblemáticas. El arcipreste y consiliario de la Agrupación de Cofradías, José López, también ha estado presente.
Unos kilómetros más allá, en Nueva Andalucía, también se ha vivido esta noche la tradicional pro-cesión del Perdón, donde su Cristo crucificado, ha recorrido las calles acompañado de la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora del Carmen de San Pedro. Tras él, la Virgen del Mayor Dolor y la Esperanza, con un rostro en el que se puede palpar el sufrimiento, ha trasladado su pena a los feligreses al sentir de la melodía de la Banda de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Vera Cruz de Estepona.
