Veteranía y liderazgo sobre los escenarios. Tom Jones volvió a demostrar que se encuentra en plena forma a la hora de actuar tras 60 años de trayectoria en el mundo musical. No faltaron sus grandes temas que corearon los presentes en el Auditorio de Marbella, una noche mágica repleta de rostros conocidos que no quisieron perderse la oportunidad de ver al tigre de Gales en directo. Cada tema llenó al público de ilusión y entusiasmo recordando sus éxitos de las últimas décadas.
Tom Jones puso anoche en liza uno de los clásicos del verano en Starlite. Brilló con un repertorio clásico y su inconfundible presencia. Un concierto cargado de fuerza, historia y estilo. Sir Tom Jones no necesita presentación, pero sí merece contexto. Con más de 100 millones de discos vendidos y una carrera que atraviesa seis décadas, el cantante galés es uno de los nombres fundamentales de la historia de la música. Temas como «It’s Not Unusual», «What’s New Pussycat» o «Delilah» forman parte del imaginario colectivo, y su capacidad vocal sigue siendo una referencia, incluso hoy, con más de 80 años a sus espaldas. Desde sus inicios en los 60 hasta su etapa más reciente, en la que ha explorado sonidos más introspectivos y versiones de autores como Dylan o Cohen, Tom Jones siempre ha defendido el poder de la interpretación por encima de cualquier etiqueta de estilo. Su presencia en directo es una mezcla de carisma, potencia y oficio. Y eso fue exactamente lo que trajo a Starlite Occident anoche.
A sus 84 años, volvió al escenario del festival para dejar claro que sigue siendo una referencia absoluta del directo y el crooner vivo por excelencia. Abrió con «I’m Growing Old», una declaración de madurez sin dramatismos, para después soltarse con clásicos que siguen funcionando como el primer día: «Delilah», «Sex Bomb», «Green Green Grass of Home» o «It’s Not Unusual». Lejos de limitarse a cantar sus grandes éxitos, Jones aprovechó el show para contar historias y versionar temas que han marcado su vida, como «Tower of Song» de Leonard Cohen o «One More Cup of Coffee» de Dylan.
Respaldado por una banda de alto nivel y con una voz que no ha perdido fuerza ni intención, Tom Jones hizo lo que solo hacen los grandes: convertir un concierto en algo más que una sucesión de canciones. Celebridades como Paula Echevarría, Gunilla von Bismarck, Cayetana Guillén Cuervo y Valeria Mazza disfrutaron del concierto en una noche mágica bajo las estrellas de Starlite Occident. Tras el concierto, el escenario Sessions acogió el esperado debut de Besmaya, el dúo madrileño formado por Javi Ojan y Javi Echávarri, amigos de la infancia que comenzaron subiendo canciones autoproducidas durante su etapa universitaria.
En apenas cinco años, han logrado dar el salto del universo digital a los escenarios más relevantes del panorama nacional, consolidando su propuesta de «pop distendido» con letras cercanas, melodías pegadizas y una identidad sonora que conecta de forma natural con el público joven. Con un directo compacto y sin artificios, repasaron temas de su disco Nuevos Lemas e intercalaron varios de sus temas más coreados: desde el arranque con «Instante» y «Tu buen chaval», hasta «El cable», «Gas» o «El tiempo que paso contigo», que el público recibió como auténticos himnos generacionales.
