Semana de tranquilidad para el CB Marbella La Cañada, que este próximo fin de semana jugará partido de liga por el parón obligado por la disputa de la Copa de Primera Nacional que disputarán CB Almería y CB Vélez junto a Náutico de Sevilla, primer clasificado del Grupo A, y el organizador Sloppy Joe`s Ginés Baloncesto. Este parón le viene bien a los azulones, que vienen arrastrando muchas bajas en las últimas semanas por culpa de las lesiones. Además, han sido varios los jugadores que se han perdido algún entrenamiento en los últimos días por haber estado encamados por culpa de un proceso vírico que ha hecho que Francis Tomé tuviera que tirar de junios y cadetes para poder completar las sesiones de preparación. “Han sido unas semanas complicadas por el tema de lesiones, pero gracias a Dios los juniors y algunos cadetes han estado disponibles para ayudarnos”. El preparador malagueño analiza en este parón liguero la última derrota del equipo en Montilla por 78-68. “Montilla ganó merecidamente, nosotros no nos encontramos en ningún momento y se nos hizo muy difícil tener continuidad. Algunos jugadores no entrenaron durante la semana por lesiones y enfermedades y llegaron al partido faltos de gasolina”. Las excusas nunca fueron buenas compañeras, por lo que Tomé insiste en que “ellos jugaron muy bien y plantearon bien el partido. Tuvimos algún atisbo de ponernos por delante, pero no nos dio para más y perdimos”.
No obstante, los resultados de este fin de semana le dan al CB Marbella La Cañada casi la permanencia en la competición. “Tenemos que ganar un partido más, estamos más cerca. El próximo partido contra CB Armilla va a marcar donde podemos estar al final de la liga, si nos quedamos en el quinto, sexto o séptimo puesto o si por el contario podemos pelear por jugar un play off. Nosotros vamos a preparar bien el partido, allí perdimos de dos puntos y si trabajamos bien tendremos opciones”.
