Se acerca el final del año 2016, un año muy productivo para el Club Baloncesto Marbella, que además de ver como sus equipos de cantera van creciendo, ha tenido la posibilidad de volver a la Primera Nacional masculina tras cinco años. Este salto cualitativo que ha tenido el club decano de la provincia de Málaga ha tenido muchos pilares, entre los que se encuentra Francis Tomé, que ejerce de director deportivo del club junto a sus labores como entrenador. Precisamente el técnico malagueño es el preparador del equipo senior CB Marbella La Cañada, que con siete victorias en once partidos se encuentra en la parte alta de la clasificación y a una sola victoria del cuarto, que da opciones a jugar la postemporada. La situación del equipo es muy buena a día de hoy, pero el último encuentro ante CB Benahavís el equipo no consiguió imponer su criterio y acabó cayendo en el derbi comarcal. “Nos pasaron por encima. Es cierto que ellos tienen jugadores de experiencia en categorías superiores, una plantilla que vale mucho dinero y aspiraciones de ascender lógicamente. Eran claramente favoritos, pero lo que me dolió fue que nos pasaran por encima en energía, sobre todo en el primer cuarto donde se decidió el partido por los 20 puntos que sacaron de ventaja”. No obstante, las ideas están claras dentro del seno del equipo. “La conclusión es que todavía no estamos preparados para competir con Vélez, Almería y Benahavís, los equipos claramente favoritos para jugar la fase de ascenso. Entre ellos y el resto hay un gran salto”.
Redacción
A pesar de la última derrota, el hecho de tener siete victorias a estas alturas de la temporada es algo que tal y como explica Francis Tomé era impensable a comienzos de temporada, donde el equipo empezó a entrenar el 11 de agosto sin un esquema claro de jugadores. “Si en agosto me dicen que a falta de una jornada para el final de la primera vuelta tendríamos 7 victorias no me lo creo. Pero sí es cierto que el equipo entrena con mucha seriedad y que el compromiso de los chicos es alto. Si vamos progresando o no, creo que no soy yo quien debe evaluarlo porque no sería honesto”. El objetivo claramente es la permanencia, porque “somos unos recién llegados a la competición como club aunque muchos jugadores lleven algunos años jugándola”, pero los azulones no descartan seguir soñando con pelear por la cuarta plaza hasta el final.
Así, de la complicada confección de la plantilla también se refiere el malagueño, que afirma que “todos me han sorprendido. Poco a poco voy conociendo a muchos. Sólo conocía de antes a Rubén Ferreira y a Ricardo Guillén porque había coincidido con ellos en otros equipos. Pero todos ellos me sorprenden positivamente, unos por unos motivos y otros por otros. Todos tienen mi respeto y admiración por el compromiso que tienen”.
De sus mejores momentos del año que se va se queda con las últimas muestras de cariño que como antes ha comentado han recibido por la operación de su novia. “Por lo reciente diría las muestras de cariño de todos. Ha sido increíble como compañeros, directivos, padres y jugadores han estado pendientes de la evolución de Ana. Eso me ha hecho más feliz que cualquier otra cosa”.
En un año tan complicado y con la próxima llegada de 2017, Francis Tomé tiene muy claro la carta para los Reyes Magos de este año. “Ahora que vengo de dormir un par de noches en el hospital por una operación de Ana, tienes más presente pedir por la salud de todos los tuyos. Y si sobra algo pues salud para mi. En todo lo demás soy muy feliz. Tengo un trabajo que me apasiona y en el que pienso 24 horas al día y unos amigos impresionantes que llevan conmigo toda la vida y a los que quiero de corazón”. Tampoco se olvida de su perro, Gabo, “la máquina perfecta de asalto y mi fiel mascota”.
Haciendo un balance de sus dos años al frente de la dirección deportiva del CB Marbella, Francis Tomé solo tiene palabras positivas sobre el proyecto que se está construyendo en torno al Serrano Lima. Según explica, “cuando acepté la propuesta de Enrique Agüera nunca pensé que creceríamos tanto. Es evidente que hay mucha cosas en las que tenemos que mejorar y errores que cometemos de los que tenemos que aprender, pero estoy seguro de que hemos avanzado mucho. El club se va modernizando, nuestra presencia en redes sociales se ha multiplicado y creo que poco a poco vamos creando un club de baloncesto en el que se intenta formar de una manera integral a nuestros jugadores. Formar personas a través del baloncesto, que es algo a lo que me he dedicado toda la vida y en lo que creo firmemente. Y todo esto se ha conseguido por el brutal trabajo de muchas personas con las que he compartido muchas horas de sacrificio y esfuerzo, pero también de alegrías, sueños e ilusiones”.