La semana pasada Marbella Confidencial adelantó el caso de una funcionaria que presuntamente había desviado fondos públicas de unas ayudas sociales para trabajadores a su cuenta. Una situación por la que fue preguntado el portavoz municipal, Félix Romero, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local que se celebra los lunes.
El edil, que prefirió guardar premura sobre el asunto hasta que no se finalice el expediente que, sí reconoció, se había iniciado. No obstante Romero apuntó que “en un Ayuntamiento de este calibre –afirmación con la que se refería al gran volumen de trabajadores, mencionando incluso que existían más de 3.500-, no voy a decir que sea normal, pero sí digo que tampoco es una rareza que, en alguna ocasión, algún servicio haga una actividad que, presuntamente, pueda tener algún tipo de irregularidad”.
Unas palabras por las que IU considera que el portavoz municipal “debe pedir disculpas”, al considerar que se trata de “graves descalificaciones vertidas cuestionando la honradez de los trabajadores públicos de este ayuntamiento, un insulto a las más de 3.500 personas de desarrollan tareas de servicio público al ciudadano en la casa consistorial”, defendió la concejala y viceportavoz de la formación, Victoria Morales, que denuncia que “no se puede consentir que un representante público realice tales aseveraciones”.
La edil subraya que “es bastante peligroso verter este tipo de insultos a las trabajadoras y trabajadores municipales, puesto que los representantes públicos en todo caso son los que tienen que velar porque la profesionalidad de los mismos sea respetada por la ciudadanía y no todo lo contrario como ha hecho el concejal del PP”.
Morales recuerda que “no es el primer ataque a los trabajadores y trabajadoras que escuchamos del equipo de gobierno, incluso en Pleno Municipal, dejando caer OSP la sombra de sospecha insinuando que hay trabajadoras y trabajadores que no cumplen ni con su horario, ni con sus funciones”.
“Desde IU, siempre hemos defendido y defenderemos a las trabajadoras y trabajadores públicos, y la prestación profesional de este servicio público, y aquel gobernante que detecte que no se está cumpliendo con el trabajo encomendado debe articular los mecanismos existentes ante los posibles incumplimientos laborales y no denostar a todo el colectivo sembrando además desconfianza en la ciudadanía”, incide la concejala.
“Lo que pedimos al equipo de gobierno es una rectificación inmediata, depurar responsabilidades ante casos de incumplimientos y dotar al servicio público de los mejores estándares de calidad, cubriendo todas las vacantes existentes en la platilla bajo los principios del acceso a la función pública y dejar la ola privatizadora que lo que hace es empeorar la calidad del servicio público”, concluye la edil.
