El Consistorio, que cuenta con una herencia de 304 millones de euros, se enfrenta a una nueva petición de pago de 1,7 millones por una construcción perteneciente a la época en la que gobernaba Jesús Gil Marín
La herencia del Grupo Independiente Liberal (GIL) sigue dejando su rastro. Tras el inicio del juicio del caso ‘mini Malaya’ que trajo de nuevo consigo el fantasma de la corrupción al Ayuntamiento de Estepona, llega un nuevo escándalo de la mano de la empresa Promociones y Propiedades Inmobiliarias Espacio SLU que ha interpuesto una demanda al Consistorio por la entrega en 1999 de un pabellón deportivo, gestado durante el único mandato en el municipio del citado partido. La sociedad reclama un total de 1.697.894,48 euros.
Se trata del polideportivo cubierto Viña Rubito, un equipamiento que se gestó y concluyó cuando Jesús Gil Marín estaba al mando del Ayuntamiento de Estepona, un nombre que todos recordarán por la investigación de corrupción inmobiliaria que estalló en torno a él.
El actual Consistorio ahora en manos del popular José María García Urbano que tendrá que asumir esta deuda a la que debe sumar toda la pendiente en torno a los 304 millones.