Agentes de la Policía Nacional han desarticulado en la provincia de Almería una organización criminal dedicada al tráfico de cocaína y marihuana. En el transcurso de la operación han sido detenidas 19 personas como presuntos autores de delitos contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, tenencia ilícita de armas y defraudación de fluido eléctrico. Los investigadores han practicado tres registros en la localidad de Aguadulce, uno en la población de Albox, doce registros en Almería capital y uno en Marbella (Málaga). Como resultado han sido intervenidos 1.424 gramos de cocaína, dos kilos de hachís, balanzas y útiles para la manipulación de la droga, dos armas de fuego con abundante munición, 120.00 euros en efectivo, 900 plantas de marihuana, 11 vehículos de alta gama, 35 terminales telefónicos, armas blancas simuladas y documentación de interés policial.
A principios del pasado mes de julio de 2017, se tuvo conocimiento de la existencia en Almería de un clan familiar que estaría dirigiendo una organización dedicada al tráfico de sustancias estupefacientes. Por un lado, el líder se encargaba de la adquisición y distribución de cocaína mientras que su hijo se hacía cargo de cultivar y preparar para su venta plantaciones de marihuana.
Vehículos «caleteados» para trasladar la cocaína
El principal dirigente, se encargaba personalmente de adquirir la sustancia contactando y negociando con sus proveedores de cocaína en Marbella. Seguidamente se desplazaba hasta esta localidad con miembros de su organización y transportaban la droga hasta Almería. Para realizar el trayecto ocultaban la cocaína en vehículos «caleteados» y empleaban varios coches como «lanzaderas», localizando y evadiendo con esta forma de realizar el viaje los posibles controles policiales que hubiera en las carreteras.
En la provincia de Almería, guardaban y custodiaban la sustancia estupefaciente en tres lugares distintos. Una vez vendida la mercancía a sus diferentes compradores, era distribuida oculta en los mismos vehículos empleados anteriormente, siendo también precedidos por los coches utilizados como «lanzaderas». Paralelamente según se iban realizando las entregas, procedían a recaudar todo el dinero, siendo trasladado y escondido en el domicilio del líder.
Una vez reunido todo el efectivo, los mismos miembros del grupo volvían a organizar otro viaje a Marbella para realizar los pagos de la cocaína entregada y a negociar nuevos envíos.
Poseían cuatro plantaciones de marihuana
Además del negocio de la cocaína, la banda investigada contaba también con cuatro plantaciones de marihuana ubicadas en la barriada almeriense de pescadería. Los cultivos contaban con instalaciones debidamente acondicionadas con la iluminación, riego y elementos necesarios para un rápido crecimiento de las plantas. El sofisticado sistema eléctrico empleado estaba conectado de manera fraudulenta a la red general.
Cuando las plantaciones eran recolectadas y preparadas para su venta, el jefe dirigía personalmente las negociaciones con los compradores interesados en adquirir la mercancía, dejando constancia nuevamente de su supremacía.
Una vez identificados todos los integrantes del grupo criminal y localizados los distintos inmuebles utilizados para sus actividades, se procedió a la explotación de la operación. En la localidad de Aguadulce y Almería capital se practicaron 15 registros y se detuvieron a 17 integrantes de la organización, en Marbella (Málaga) los agentes procedieron al arresto del principal proveedor de cocaína y se realizó un registro domiciliario y en la población de Albox (Almería) se práctico la última detención de un integrante de la banda.
Durante el desarrollo de la última fase del operativo, además de la Policía Nacional en Almería han participado agentes de las comisarías de El Ejido, Málaga y Lorca (Murcia). Todos los detenidos han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número cinco de Almería, quien ha ordenado el ingreso en prisión de diez de los arrestados.