La responsable del Área de Cultura, Gema Midón, reconoció hoy que fue una «imprudencia y un error» que el Consistorio permitiera la entrada de maquinaria pesada en una parcela anexa a la Basílica Paleocristiana Vega del Mar, del siglo II y catalogada como Bien de Interés Cultural por la Junta de Andalucía, para realizar las labores de acondicionamiento para instalar un merendero. Midón indicó que «no volverá a suceder nunca más que entre una máquina de este tipo en esa parcela», explicando que miembros de su Delegación se han personado en diferentes ocasiones en la parcela anexa a la necrópolis visigoda y han constatado que «no había un destrozo ni una alteración directa del patrimonio, pero sí muchos fragmentos en superficie, algo que ocurre habitualmente», subrayó a preguntas de los periodistas. En este sentido, apuntó que visitó la parcela con una arqueóloga de la Junta de Andalucía «y coincidimos en que, visualmente y en superficie, no se ve que haya ningún destrozo».
Midón afirmó que el Consistorio no ha recibido ningún informe del Gobierno andaluz sobre los posibles daños que la excavadora hubiera podido generar en la necrópolis ya que el documento lo tiene que dirigir al Seprona, que investiga los hechos tras la denuncia de un vecino. Precisamente, esta denuncia ha sido ampliada, incluyendo nueva documentación de fotografías, planos y declaraciones vertidas en redes sociales por determinados cargos de confianza del Ayuntamiento de Marbella, tal y como explicó en un comunicado el denunciante, Manuel Fernández Valdivia.
A este respecto, la responsable municipal calificó de «gratificante» que los vecinos denuncien las situaciones «anómalas» que observen ya que, ha señalado, es señal de «que están concienciados e interesados por el significado del Patrimonio Histórico, una de las metas de la Delegación».
Midón, sin embargo, pidió «ser consciente de que no se puede crear este tipo de alarmas, muchas veces injustificadas o, según quién haga la denuncia, tratar de sacar réditos políticos». «Las puertas de la Delegación y mis teléfonos están abiertos para todo aquel que hubiese querido conocer cuál era la realidad más que salir a muchos medios de comunicación».