Las obras de remodelación que se están ejecutando en la Avenida Doctor Maíz Viñals y que afecta a una de las zonas de esparcimiento de la que disfrutan los vecinos de la Divina Pastora, el Parque de Arroyo de la Represa, está produciendo malestar entre los residentes de la zona y los comerciantes, ya que la obra conlleva una reducción de la zona de paseo de este bulevar, así como la retirada de algunos de los bancos de este parque por la cercanía sobre la que se ejecutará el carril bici. Son muchos los residentes que han traslado sus quejas a la Asociación de Vecinos La Concha, colectivo responsable de los que viven en esta zona, ya que consideran que el proyecto “no se ha planteado de una forma adecuada”, tal y como explica Amparo Vergara, miembro de la Junta Directiva de esta asociación, quien explicaba precisamente la reducción de dicho espacio de paseo y del número de asientos en el parque. Para la representante, aunque la actuación se presente como un área donde se crearán nuevas plazas de aparcamiento -91 en total- “lo cierto es que como no tendrán un carácter rotatorio, estos nuevos estacionamientos no serán para los vecinos, sino para las personas que trabajen en la zona que aparcarán su coche a primera hora y lo quitarán cuando finalice su jornada laboral, por lo que tampoco se fomentará el que se venga a comprar a la Divina Pastora”. De ahí, que los comerciantes también se hayan unido a las protestas de los vecinos.
Irene Catalán
Y es que además, desde la AAVV cuentan con una posible solución para esta falta de aparcamientos de la zona, pidiendo que se permita el estacionamiento en el espacio reservado para la parada del autobús de los pasajeros que vienen al museo del Bonsai, ubicado en dicho parque. “Los grupos que vienen a visitar el museo lo hacen una vez al mes como mucho, por lo que ese espacio se podría aprovechar para el estacionamiento de los vehículos y no afectaría a la fisionomía actual del Parque de la Represa”, puntualiza la representante vecinal.
Durante la presentación del proyecto, la concejala de Obras, Blanca Fernández, explicaba que la obra está enmarcada en “la apuesta del equipo de Gobierno por un modelo de movilidad sostenible y por el fomento del uso de la bicicleta”, aunque desde la AAVV se cuestionan dicho modelo, teniendo en cuenta que la inclusión del carril, restará espacio a la zona de paseo, junto a que el Parque de Arroyo de la Represa cuenta en su haber con una importante vegetación. “Uno de los atractivos de este parque son sus plantas, tiene una gran riqueza en este sentido”, destacaba Vergara, quien decía esperar que esa imagen no cambie con esta obra.
La actuación que se ejecuta en la Avenida Maíz Viñals comprende una superficie de 3.500 metros cuadrados y contempla la reordenación de la superficie para habilitar 91 plazas de estacionamiento en batería en el margen oeste, así como la ejecución de un carril bici de doble sentido con una anchura de 2,6 metros y 737 metros de longitud. El proyecto también contempla la sustitución del pavimento dañado y la instalación de 25 luminarias tipo LED.