El urbanismo ha sido el protagonista en la Junta de Gobierno celebrada hoy, en la que se han aprobado licencias de obra nueva y de primera ocupación por valor de casi 23 millones de euros para un total de 124 viviendas. Unos datos que, según la edil del área, Kika Caracuel, ponen de manifiesto que «hay muchísima actividad urbanística en la ciudad» y que «la finalización continúa».
Se trata además de construcciones en diversos puntos del municipio y de «distinta tipología, que representan la variedad urbanística de Marbella». Así, encontramos licencias de viviendas unifamiliares en zonas como Puente Romano o Sierra Blanca, valorados en algo más de 600.000 euros o 4’3 millones respectivamente, pero también de edificaciones plurifamiliares como 88 viviendas en Severo Ochoa, por valor de 10’8 millones, o en calle Lobatas, con una edificación para seis viviendas valoradas en algo más de 1 millón de euros. Otra de las licencias de obra aprobadas hoy es la de la reforma de Marina Banús por 2’1 millones de euros. En lo que respecta a las de primera ocupación hay construcciones de 3 millones de euro o de una vivienda por 666.000 euros.
En total se han concedido licencias de obra nueva para 96 viviendas, por un valor total de 19 millones de euros, y 28 de primera ocupación, por 3 millones de euros.
SUBVENCIONES ASOCIACIONES DE VECINOS
En otro orden de cosas, el portavoz municipal, Féliz Romero, ha informado de que se ha dado luz verde a la convocatoria de subvenciones para asociaciones y federaciones de vecinos, que contará con un presupuesto de 70.500 euros y que se celebrará en concurrencia competitiva.
Mediante esta convocatoria se busca ofrecer a estos colectivos «las herramientas que garanticen y ayuden a la labor pública de estas entidades», apuntó Romero. Con estas ayudas se cubren un máximo del 80% de la actividad sufragándose el 20% restante, de forma cofinanciada, por el propio colectivo.
La convocatoria está pendiente de publicarse, momento a partir del cual los colectivos tendrán un plazo de 10 días para presentar proyectos que serán valorados por una mesa técnica. Romero ha destacado que desde que existen «no han quedado nunca proyectos desiertos», teniendo incluso en ocasiones que tener que abrirse una segunda convocatoria para poder cubrir las necesidades.
