El Ayuntamiento de Marbella cedió oficialmente el 23 de diciembre de 2020 la parcela municipal de La Torrecilla al Ministerio del Interior para que el Gobierno de España construyera la nueva comisaría de Policía Nacional. Un suelo de 7.337 metros cuadrados, adquirido previamente por el Consistorio por 3 millones de euros, y listo desde entonces para que el Estado iniciara las obras.
Sin embargo, casi cinco años después, la realidad es demoledora: no hay proyecto, no hay presupuesto, no hay licitación y no existe fecha alguna de inicio. La comisaría para Marbella, incluida en el Plan de Infraestructuras de Seguridad del Estado 2019–2025, sigue exactamente igual que el primer día: monte y silencio administrativo.
La responsabilidad del Gobierno y de la diputada socialista Isabel Pérez
El retraso ya no admite excusas. El Gobierno de España, dirigido por el PSOE, es plenamente responsable de que la comisaría no haya avanzado ni un milímetro en estos casi cinco años.
Pero también lo es la diputada nacional por Málaga y concejala del PSOE en Marbella, Isabel Pérez, quien durante todo este tiempo no ha conseguido ni un solo avance para su ciudad, pese a ser la voz directa del municipio en el Congreso de los Diputados. Su papel, lejos de defender los intereses de Marbella, se ha limitado a declaraciones genéricas mientras la infraestructura policial clave permanece abandonada.
La situación se agrava ante la ausencia de explicaciones por parte del Ministerio del Interior, de la Delegación del Gobierno en Málaga y de la propia Subdelegación. Nadie ha dado una sola respuesta ni ha asumido la falta de compromiso con una ciudad que sí ha cumplido con todas sus obligaciones.
Una comisaría imprescindible para una ciudad de más de 150.000 habitantes censados y 350.000 personas reales al mes
Marbella es un municipio con más de 150.000 habitantes censados, pero la realidad operativa supera con creces esa cifra: la población flotante media mensual supera las 350.000 personas, entre residentes temporales, propietarios de segunda residencia y visitantes.
Una ciudad de esta magnitud necesita con urgencia unas dependencias policiales modernas y dimensionadas a su realidad. Sin embargo, el Gobierno sigue actuando como si Marbella fuera una ciudad menor, ignorando su peso demográfico, turístico y económico.
El Ayuntamiento cumplió en 2020. El Gobierno no ha cumplido en cinco años
El Ayuntamiento dejó todo hecho:
– Parcela cedida.
– Suelo adquirido con recursos municipales.
– Ubicación estratégica junto al futuro Palacio de Justicia.
– Zonas verdes y aparcamientos planificados.
– Expedientes administrativos al día.
Pese a ello, el Gobierno del PSOE mantiene el proyecto paralizado desde hace casi un lustro, sin justificar por qué Marbella no es una prioridad.
Conclusión: cinco años de abandono estatal
Mientras Marbella hace los deberes, el Gobierno de España y la diputada socialista Isabel Pérez siguen sin entregar nada. Ni un plano. Ni un presupuesto. Ni una sola gestión efectiva.
Cinco años después, la comisaría prometida para Marbella sigue siendo una promesa incumplida y un símbolo del abandono del Estado hacia una ciudad que aporta, crece y lidera, pero a la que el Gobierno se empeña en ignorar.
