Podemos ha basado su proyecto para la ciudad en una única idea: impedir que gobierne el PP. Sus dirigentes han reconocido siempre que una ciudad dirigida por la formación liderada por los populares, que resultaron vencedores en las elecciones municipales con un 41% de los votos aunque sin alcanzar la mayoría absoluta, era el peor escenario posible. Una situación que parece más que probable vuelva a producirse después del anuncio de OSP, formación que hasta el momento integra el tripartito, de promover una moción de censura que suponga la salida de José Bernal de la alcaldía de Marbella. Desde que el pasado viernes se conociese la decisión del Consejo Consultivo sampedreño los acontecimientos se precipitaron en el seno de la formación morada que celebró asamblea el domingo por la tarde y que el lunes por la mañana ya realizó su primer anuncio de aceptar ahora sin condiciones los presupuestos que pudiesen presentar el tripartito para los ejercicios de 2018 y 2019.
Parece no importar ahora a los acólitos de Pablo Iglesias el modelo de ciudad que promueva el tripartito ya que no sujetan a ninguna condición su voto favorable al documento que determina el porvenir de la ciudad durante todo el año.
La formación morada estaría ahora incluso a someter a su militancia la posibilidad de entrar en el gobierno del tripartito, así lo ha reconocido su secretario general en una entrevista concedida a Diario Sur, pese a que el no formar parte de gobiernos dirigidos por el PSOE es una premisa política del partido a nivel andaluz.
Desde Podemos, en los últimos días, se han movilizado para defenderse de las acusaciones de bloqueo de la política municipal que argumentaron los sampedreños para salirse del tripartito, señalando que no eran un motivo sino una excusa, pero pese a ello, la formación morada parece absolutamente dispuesta a bloquearse para impedir el regreso de la líder popular local, Ángeles Muñoz.
UN GOBIERNO EN MINORÍA
Contar con un equipo de Gobierno en mayoría, en el que todos los componentes del Ejecutivo estén dispuestos a gobernar y no solamente a exigir que otros hagan cosas –como en numerosas ocasiones ha referenciado el concejal de la formación y Teniente de Alcalde de San Pedro Alcántara, Rafael Piña- parece ser, más allá de las elucubraciones que se están vertiendo en los últimos días, el motivo principal que ha llevado a OSP a romper el tripartito.
El equipo de Gobierno de PSOE, IU y OSP cuenta con doce concejales, uno menos de los que tiene el PP y a dos de la mayoría absoluta que les permite sacar sus acuerdos adelante, un quórum que completaban con los dos ediles de Marbella Sí Puede –marca local de Podemos-. Una situación que ha supuesto la ralentización de la aprobación de numerosas medidas a en los dos años de Gobierno de la actual legislatura, entre ellas la aprobación de presupuestos que se han postergado en el tiempo, de hecho los del vigente año se aprobaron en mayo.
Los sampedreños se han mostrado en todo momento agradecidos y en buena sintonía con los otros dos miembros del equipo de Gobierno (PSOE e IU), pero las reacciones de Podemos después de conocerse la primera decisión del Consultivo de OSP habrían precipitado los acontecimientos.
LA LISTA MÁS VOTADA
Desde el Partido Popular han defendido la moción de censura como un instrumento legítimo y dentro de la más absoluta normalidad democrática. Los populares han referenciado además el hecho de que en junio de 2015 la lista encabezada por Ángeles Muñoz fue la más votada por los ciudadanos, alcanzando el 41% del apoyo frente al 26% que respaldó la candidatura de Bernal.
De hecho, la coalición PSOE,IU y OSP, representaría casi el mismo porcentaje de voto que PP, superándolo por un punto (42%), mientras que la coalición de los populares con los sampedreños supera ligeramente la representación de la mitad de los votantes con un 50.16%.
Los números son claros y especialmente cuando se traducen en número de concejales; PSOE, IU y OSP, suman un total de 12; mientras que PP y OSP alcanzan los 15, uno más de la mayoría absoluta que permite gobernar de forma estable pudiendo llegarse a acuerdos dentro del Gobierno local y asegurándose así que las medidas adoptadas saldrán adelante.