La Rugulopteryx okamurae, fue incluida a finales de 2020 en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, regulado por el Real Decreto 630/2013 y, en base a esta ley, el Ministerio de Transición Ecológica redacta una estrategia para su erradicación y contención
En la actualidad, Marbella se encuentra haciendo frente a un grave problema en sus costas debido a la invasión del alga Rugulopteryx okamurae. Esta especie fue detectada en 2016 en zonas del Estrecho de Gibraltar y desde entonces no ha dejado de expandirse por el litoral andaluz de Cádiz y Málaga. Su proliferación provoca cada año grandes arribazones extraordinarios que se acumulan en las playas donde llegan desplazados por las corrientes, y en Marbella con 27 kilómetros de litoral, se concentran mayoritariamente en las playas de San pedro alcántara, Nueva Andalucía, Fontanilla, Venus, Bajadilla y Cabopino. Los grandes montículos que se originan impiden el tránsito de personas, así como malos olores debido a las altas temperaturas. Como consecuencia, además de los problemas que esta situación provoca en la ciudadanía, se está generando una mala imagen para el municipio lo que afecta de manera directa e indirecta al turismo en la ciudad. El sector pesquero, por su parte, también se está viendo afectado debido a las pérdidas que esta alga le está ocasionando.
Por si fuera poco, desde el año 2019 se viene incrementando el volumen de algas que llega a la orilla, siendo cada vez más importante el desembolso económico que el Ayuntamiento precisa, un problema que por su volumen e incremento extraordinario excede de las competencias propias e inherentes del municipio que son la normal limpieza y mantenimiento de playas. De hecho, desde el año 2020, el Ayuntamiento ha destinado un total de más de 2 millones de euros a estas labores de limpieza y retirada, y solo en lo que va de año el coste de retirada de alga de las playas se ha ido incrementado exponencialmente debido a que el volumen ha ido aumentando casi mensualmente, ascendiendo a la cantidad de casi 800.000€ hasta el mes de junio.
Desde el Consistorio no se encuentra una explicación, cuando dicha problemática es responsabilidad única del Gobierno de la Nación, tal y como se recoge en el Real Decreto 630/2013 donde la Rugulopteryx okamurae fue incluida a finales de 2020 en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras, y, en base a esta ley, el Ministerio de Transición Ecológica redacta una estrategia para su erradicación y contención. También con fecha de 13 de julio de 2022 ha sido incluida en la Lista de Especies Exóticas invasoras preocupantes para la Unión Europea, por lo que su gestión queda regulada por el Reglamento (UE) Nº 1143/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 22 de octubre de 2014, y el Reglamento de Ejecución (UE) 2016/145 de la Comisión, de 4 de febrero de 2016.
Por todo ello, el equipo de Gobierno en el Pleno del Ayuntamiento en su sesión ordinaria de julio, con la abstención únicamente del Grupo Socialista y el apoyo del resto de formaciones, ha instado al Gobierno central a que, de manera urgente, se incluyan en la Ley de Presupuestos General del Estado para 2025 las partidas necesarias para sufragar los gastos que genera en Marbella esta problemática, teniendo además en cuenta el canon estatal en concepto de playas que la ciudad paga anualmente al Estado.
Importantes costes de limpieza para el Ayuntamiento de Marbella
Según los datos obrantes en las Delegaciones de Limpieza y Rsu y Playas, en 2019 se retiraron más de 1.530.000 kilos de alga invasora, en 2020, 750.000 kilos, en 2021, 900.000 kilos y 1.050.000 entre los años 2022 y 2023.
En lo que va a de 2024 se ha retirado más de 1.800.000 kilos de alga, solo en el mes de abril se retiraron 1.359.000 kilos.
El dispositivo de limpieza diaria de alga invasora en Marbella está integrado por dos palas cargadoras, tres retroexcavadoras, cuatro camiones bañera, dos pick up, un tractor con remolque y dos limpiaplayas. Si bien y dado el volumen de alga se van a adquirir dos máquinas quita algas, y 2 tractores con remolque adicionales.
Los trabajos comienzan todos los días a las 04.00 horas y se prolongan hasta las 10.00 horas, cuando la maquinaria pesada debe estar fuera de la playa en temporada alta por seguridad.
Las algas se acopian para que sequen y pierdan peso, para su posterior traslado al Complejo Medioambiental Costa del Sol de Málaga donde se gestionan como residuo vegetal cobrándose la tasa 42,94€/ tonelada. Por lo que genera el problema del coste adicional de abono de tasa a vertedero.
