Al equipo de Gobierno parece no haberle sentado muy bien la concentración que el pasado viernes los trabajadores de los Organismos Autónomos Locales (OALES) organizaron en las puertas del Ayuntamiento para solicitar que se agilicen los trámites de su integración en la plantilla municipal. Javier Porcuna, portavoz del Ejecutivo local, a preguntas de los periodistas sobre la misma, señaló en rueda de prensa que “habría que preguntarle a los convocantes cuál es su interés”. Para Porcuna es “un poco injusto” que se le reclame al actual Gobierno municipal por el proceso de integración de estos trabajadores ya que, según señaló el edil, “no hemos llegado todavía al primer año de Legislatura”, cuando “se ha planteado la negociación, se ha llegado a acuerdos sobre la integración y se está trabajando para la tramitación del expediente”.
B. Sánchez
Los trabajadores apuntaron el pasado viernes a la promesa que el alcalde de la localidad, José Bernal, les realizó sobre que el pasado pleno, coincidente con la fecha elegida para la concentración, el máximo órgano de representación de la ciudad aprobaría la disolución de estas entidades, paso previo necesario para la integración.
Pero parece que, ahora y tras las promesas, la solución no es tan fácil para el equipo de Gobierno, así trató de desquitarse Porcuna apuntando a otros agentes necesarios para la conclusión del proceso, “no sólo depende de la voluntad del equipo de Gobierno, depende de la realización de informes que en algunos casos son muy exhaustivos”.
El portavoz municipal defendió los pasos dados por los integrantes del Ejecutivo local y señaló que “hay un expediente disolutorio en marcha y depende de la aportación de informes; la disolución de OALES no es una cosa tan simple como se plantea”, añadiendo que “a veces hay informes que tardan más y no depende de la voluntad de este equipo de Gobierno”.
A pesar de ello, el portavoz aseguró que el “compromiso” del equipo de Gobierno sigue siendo firme y que se acometerá de forma “progresiva en los próximos cinco años”.