Luis Ángel Maté se toma unos días de respiro tras regresar de su primera parada en este mes de junio. El ‘Lince Andaluz’ acaba de llegar tras un sobresaliente debut en el Skoda Tour de Luxemburgo (2.HC) que se disputó entre los días 1 y 5 de este mes. Una carrera de la que se va «enormemente contento» tras el rendimiento desplegado. «Me ha gustado mucho, es una carrera muy bonita y abierta de principio a fin, por el propio concepto y recorrido de la prueba. Quizás el mal tiempo del prólogo abrió demasiadas diferencias, porque a algunos nos cayó un chaparrón tremendo y eso hizo que las distancias fueran mayores de lo que normalmente son», explica Luis. Pero una vez sobrepuesto y seca la lluvia del primer día, tanto Maté como el equipo Cofidis hicieron un gran trabajo en la carrera: «Hemos conseguido el objetivo, que era ganar una etapa. Además, si te fijas en los ganadores han estado caras. Dos de Gilbert, una de Greipel y otra nuestra con Turgis», recuerda. Por cierto, el marbellí tuvo mucho que ver en el triunfo de su compañero, y es con lo que más contento se va: «Ha sido una carrera muy de fuerza, con cotas cortas y explosivas que sobre el papel podrían venirme peor. Y me he visto muy delante, lo que me da mucha confianza para todo lo que viene. Ahora hay que seguir trabajando para hacer bueno este rendimiento». Y es que Luis ha terminado en la decimocuarta posición de la general, pese a haberse dejado 40 segundos en el prólogo del primer día por unas calles anegadas.
Redacción
Volviendo a la victoria de Turgis, en la que Maté tuvo un papel muy activo, fue ni más ni menos que en la etapa reina de la carrera, con el paso por el Col D’Europe hasta en tres ocasiones: «Pasamos la primera vez, lo que me sirvió para conocerlo. Iba una fuga numerosa delante, y en la segunda subida arranqué, se vino Juul-Jensen conmigo y empezamos a coger a gente de la escapada. Pero mi idea era servir de puente para el ataque de Turgis», evoca. Era uno de esos planteamientos estratégicos que rara vez se cumplen al cien por cien.
Pero a veces ocurre. «Atacó Frank y se trajo a Turgis. Me descolgué y lo esperé, luego lo metí en el primer grupo y seguimos tirando. Coronamos cuatro en cabeza, y dos del mismo equipo. Como Turgis era rápido al sprint y podía ponerse líder con las bonificaciones, lancé el sprint y ganó. Esto pasa pocas veces, que todo salga como uno ha pensado». Luis terminó cuarto la etapa y lo celebró igual que si hubiera sido suya.
Con estas buenas sensaciones, el ‘Lince Andaluz’ sigue entrenando para los próximos retos. La semana que viene volverá a Francia a disputar la Route du Sud. Una carrera que contará con Nairo Quintana y que fue la última donde alzó los brazos, allá por 2011: «Tenía muchas ganas de volver. Además este año va a ser dura. Hay una etapa con doble sector y una crono de 13 kilómetros, y el etapón del sábado en Val D’Azun, con cinco puertos entre ellos el Tourmalet y acabando en alto», aventura. Después le espera otra de esas pruebas ineludibles en su calendario: el Campeonato de España, el próximo 25 en Cocentaina.