El Marbella FC ha entrado ya en la parte decisiva de la temporada y se mantiene firme entre los cuatro primeros clasificados del grupo cuarto de Segunda B. El play-off de ascenso está cada vez más cerca pero el equipo no se relaja y sigue aspirando al primer puesto, que le daría más oportunidades para subir de categoría. Ni el vértigo de su privilegiada posición ni la plaga de lesiones han mermado su rendimiento en ningún momento y está perfectamente preparado para afrontar el sueño del ascenso en poco más de un mes. Antes de ello, deberá asegurar su clasificación en los partidos que quedan, una tarea siempre difícil ya que todos los equipos se juegan algo en este tramo final de la temporada.
Los de Fernando Estévez se están mostrando como un equipo serio y muy sólido que destaca por su seguridad defensiva y su buen trato del balón. Las bajas de Chus Hevia y Luis Rioja han privado al equipo de algo de chispa en ataque pero sus sustitutos han dado la talla y han respondido con mucho trabajo para que no se note demasiado su ausencia. El jugador asturiano ya está recuperado de su lesión de menisco y en breve volverá también Luis Rioja. Los dos, junto con Lolo Pavón y Carlos Indiano, serán muy importantes en estos últimos partidos y en el futuro play-off por su incuestionable calidad.
Todos los jugadores de la plantilla están rindiendo a su máximo nivel pero disponer de esos cuatro es la mejor garantía para afrontar partidos tan cruciales como los que se avecinan. También da mucha seguridad la presencia de Wilfred en la portería, que en cada jornada destaca por sus espectaculares intervenciones dando puntos muy valiosos al equipo. Pero la clave del éxito hay que buscarla en la enorme unión del vestuario, que es vital para superar las adversidades y alcanzar los objetivos en cualquier deporte colectivo.