La playa de Los Monteros ha experimentado una transformación radical. Gracias a la intervención conjunta de Acosol y el Ayuntamiento de Marbella, se han retirado los pozos y colectores obsoletos de la red de saneamiento, eliminando vertidos y mejorando notablemente la calidad ambiental del litoral.
El antes y el después es innegable. Donde antes predominaban infraestructuras desgastadas que afectaban el paisaje y comprometían el saneamiento, ahora se observa una playa renovada y atractiva para vecinos y turistas. Esta intervención no solo optimiza la gestión del agua y reduce los vertidos, sino que también realza el valor estético de la zona, posicionándola como un ejemplo de buenas prácticas en materia de medio ambiente.
Sin embargo, este logro se destaca aún más al compararlo con el abandono que ha caracterizado la gestión del Gobierno de España sobre las playas de la Costa del Sol. Mientras el Ayuntamiento y Acosol apuestan por la inversión y el cuidado del litoral, el Ejecutivo central continúa sin destinar los recursos necesarios para la regeneración y protección de estos espacios. Este desinterés y falta de inversión estatal deja en evidencia una preocupante disparidad: mientras la gestión local asume el reto de preservar nuestros bienes comunes, el Gobierno de España parece relegar el cuidado de nuestras costas a un segundo plano, obligando a los municipios a asumir por sí solos tareas fundamentales para el bienestar ciudadano.
La transformación de Los Monteros es, en definitiva, un grito visual y funcional que denuncia el abandono estatal y demuestra que la verdadera revitalización de nuestras playas depende de una gestión local comprometida y decidida.
