Esta mañana, en Pleno Extraordinario, se ha aprobado la nueva Ordenanza del Servicio de Transporte Público en el que se recoge la gratuidad de los autobuses urbanos con el voto favorable del equipo de Gobierno y la abstención de los partidos de la oposición (Marbella Sí Puede, Izquierda Unida y PSOE). Una medida con la que se espera “poner a disposición de la ciudadanía el recurso de movilidad en igualdad de oportunidades”, según explicó el portavoz municipal y responsable del área, Félix Romero.
B. Sánchez
“La extensión de la gratuidad requiere de un despliegue logístico muy importante para poder expedir los casi 15.000 títulos que ya están solicitados se requiere que este acuerdo se adopte y se estimen o desestimen” explicó el edil. En esta línea, el pleno ha dado cuenta de las alegaciones presentadas, aprobándose las dos que ha presentado la delegación de Transporte, que preveían la no identificación en la tarjeta mediante fotografía –por la dilación en los tiempos que supone su impresión- y la determinación de optar por la obligatoriedad de “portar documentos que les permita identificarse para evitar el uso fraudulento”, informó Romero.
También se han presentado alegaciones por parte de Izquierda Unida, que han sido desestimadas en su mayoría, informó Romero, quien aseguró que “deben presentarse en otro ámbito”, como el caso de la gratuidad de las tres líneas que son de titularidad de la Junta, precisando el edil que son dos las que no discurren íntegramente por el municipio, y que precisamente al ser competencias de la administración autonómica no pueden determinar desde el Ayuntamiento la gratuidad. No obstante, Romero adelantó que “se está cerrando un acuerdo con la Junta” para que también sean gratuitas. Tampoco se han aceptado otras para que se determine el número de autobuses, ya que no se puede dar una cifra cerrada sino que “dependerá del número de habitantes”; o el hecho de se establezca un empleado municipal como responsable del servicio “porque ya está previsto en la nueva ley de contratos del sector público, precisando incluso que ha se ha realizado su nombramiento y que se trata de un técnico de transporte. Otras cuestiones, precisó, deberían canalizarse a través de la ordenanza de tráfico y movilidad.
El portavoz de la formación de izquierdas, Miguel Díaz, defendió que “hemos presentado alegaciones con el objetivo de mejorar”, y pese a que valoró la medida de la gratuidad, “es adecuado”, destacando que “es un parámetro que se está poniendo en marcha en muchos países”, lamentó que “nos falta todo lo anterior, debería ser la guinda”. “Lo primero tiene que ser la calidad, reiterar que de nada servirá un autobús al que sea gratis subirse pero no sea puntual”.
La misma línea siguió el portavoz de Marbella Sí Puede, José Carlos ‘Kata’ Núñez, quien aseveró que “los autobuses son malos, impropios de una ciudad que quiere ser cinco estrellas” y aventuró que “va a seguir siendo malo porque hemos perdido la oportunidad de recuperar el servicio”, al tiempo que tildó la medida como una “electoralista”.
