La reestructuración de la Delegación de Urbanismo por sectores anunciada por la concejala del ramo, Isabel Pérez, a principios de este mes, supone una nueva “falta de transparencia” por parte del equipo de Gobierno, en tanto en cuanto esta medida ha supuesto la designación de nuevos puestos de trabajo mediante de decreto del alcalde, José Bernal, una actuación que requiere, tal y como explicó hoy el concejal del PP, Cristóbal Garre, pasar por Junta de Gobierno y por sesión plenaria. “La aprobación por decreto no sigue el procedimiento legalmente establecido para la contratación de puestos de trabajo”, apunta el edil, anunciando que incluso los sindicatos están estudiando la posibilidad de recurrir dicha resolución. A esto se añade, tal y como indicó Garre, que la reestructuración de Urbanismo carece de soporte jurídico y económico, lo que genera “más inseguridad y caos en la gestión”. Para el edil de la formación azul esta actuación es una más que pone de manifiesto que “lo que menos hay en este Ayuntamiento es transparencia”, teniendo en cuenta que carece de informe económico que respalde la nueva estructura, una fiscalización que debe incluir la creación de jefaturas de servicios, unidades y negociados. De hecho, según Garre se han creado tres puestos de jefatura para, además de en Marbella, San Pedro y Las Chapas, lo que supone un coste añadido.
Irene Catalán
Garre ha destacado que esta nueva reestructuración de la Delegación de Urbanismo, la tercera, responde a “la improvisación y la falta total de conocimiento”, por parte del equipo de Gobierno en lo que atañe al de las administraciones públicas, por lo que instó “a ponerse a trabajar y dejar los experimentos en la gestión de un Ayuntamiento tan importante como el de nuestra ciudad”.
Asimismo, el concejal ha lamentado que casi un año después de que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2010 fuera anulado, no se haya sacado todavía a licitación el nuevo planeamiento.
