La portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Marbella, Isabel Pérez, ha exigido a la alcaldesa Ángeles Muñoz que “dé marcha atrás” en la expropiación del edificio de la Delegación de Urbanismo, a pesar de que el PSOE ocupó este mismo inmueble durante dos años en su mandato sin plantearse ni un solo cambio. Ahora, sin embargo, critican la operación y piden que se invierta en otros edificios como la Casa del Gobernador o el inmueble abandonado junto a la estación de autobuses.
El PSOE, que durante su gobierno no se mostró especialmente preocupado por el estado del edificio ni la conveniencia de su ubicación, ahora denuncia que la expropiación “solo responde a intereses particulares”. Además, se quejan de que el justiprecio ofrecido por el Ayuntamiento podría dispararse, pero olvidan que fueron ellos quienes no pusieron en marcha ninguna alternativa durante su tiempo en el poder.
Isabel Pérez ha asegurado que “estamos ante un despilfarro obsceno del dinero de todos los vecinos”, pero la ironía de la crítica es palpable, considerando que el PSOE, en su momento, nunca cuestionó ni la idoneidad del edificio ni su coste. La concejala ha llegado incluso a afirmar que esta operación “carece de interés público”, sin mencionar que, bajo su gobierno, el edificio de Urbanismo fue utilizado sin reservas, mientras que ahora parece ser un lastre.
En resumen, el PSOE parece haber olvidado que, cuando estuvieron en el gobierno, no solo usaron el edificio de Urbanismo sin hacer objeciones, sino que también dejaron pasar la oportunidad de repensar otras opciones más eficientes. Ahora, tras dos años de pasividad, se presentan como los salvadores, pero su falta de coherencia es más que evidente.