La Asociación Multisectorial de la Jardinería Andaluza (AMJA) pone de ejemplo el nuevo parque de Valentuñana como modelo de espacio público que sirve para “mejorar el bienestar físico, mental y social de una población”, según han destacado.
Este jardín público ha sido objeto de una publicación en la que se analiza el resultado del Parque Público de la calle Valentuñana de Marbella, “un jardín de estilo Mediterráneo-Tropical, de bajo mantenimiento, que despierta los cinco sentidos del visitante”. Destacando que “los senderos se acompañan de plantas de gran valor ornamental”.
Y es que el nombre, ‘Jardín de los sentidos’, no ha podido estar mejor escogido. Así, destacan del olfato que “las fragancias son las protagonistas del parque” -se han plantado más de 450 plantas aromáticas nuevas-. De la vista apuntan que “la contemplación de un entorno armonioso, con elementos vegetales atractivos, como las flores de los Callistemon c. o los Hibiscus es un placer visual. Las curvas de los senderos y rotondas, y los diseños paisajísticos que los acompañan, transmiten equilibrio con el entorno. El cromatismo rojizo delas Nandinas d. y las Photinias x. f. contrastará con los verdes del bosque”.
Respecto al oído, apuntan que “podremos escuchar las melodías de los pájaros atraídos, sin duda, por un gran número de frutos como los de las especies autóctonas Myrthus c., Arbutus u.o Piscacia l. El sonido del viento atravesará las nuevas plantaciones”. El gusto es protagonista con los “frutos de plantas autóctonas como la Phillyrea a. o el polen de flores como la de la Abelia g. fomentarán la biodiversidad”.
Y por último el tacto, en referencia al cual señalan que “el ciudadano podrá recorrer el parque y palpar texturas suaves como las del Malvaviscus p.,rugosas como las de la Acca s. o dentadas como las de Arbutus u.”.
Un jardín en el que destaca la flora autóctona andaluza con cipreses, lentiscos, madroños, olivillas, palmito, cantueso, romero, mirto, siempreviva o azucenas amarillas.
Este espacio es obra de la paisajista Rosa María Ceño Elie-Joseph, cuyo estudio internacional, Gingko Landscape, trabaja en 6 idiomas. El parque forma parte del Bosque Urbano de Marbella y se constituye como un nodo conector de la Infraestructura Verde de la ciudad.