El Marbella FC ya está disputando el play-off de ascenso a segunda división, un premio muy merecido tras realizar la mejor temporada de su historia en la categoría de bronce del fútbol español. El equipo local ha batido en este campaña casi todos sus registros en el grupo cuarto de Segunda B empezando por la puntuación ya que nunca antes había alcanzado los setenta puntos. También ha conseguido su mejor clasificación gracias al segundo puesto en la tabla superando además sus registros goleadores tanto a favor como en contra. Y por último, ha establecido un nuevo récord en el número de victorias totales, de triunfos en casa y de partidos invicto.
Pero el mayor logro del equipo es que ha vuelto a enganchar a la afición después de varios años de decepciones. La asistencia al Estadio Municipal ha ido creciendo a lo largo de la temporada gracias a las victorias y al buen juego de los blanquillos, que se han mostrado intratables como locales. En el último partido ante el Villanovense hubo ya una comunión total entre la afición y el equipo, que tuvo un recibimiento espectacular a su llegada al estadio. Por otro lado, el aumento del número de asistentes ha servido para poner en evidencia las muchas deficiencias de la instalación municipal, que exigen soluciones cada vez más urgentes.
La gran ilusión de los aficionados ha llevado al club a poner a su disposición autobuses en las últimas salidas del equipo e incluso a bajar los precios de las entradas tras un bonito llamamiento de Fernando Estévez. Para terminar, quiero destacar la gran calidez humana de todo el equipo, que tuve el honor de apreciar en primera persona cuando celebraron conmigo la victoria en el último partido de la temporada regular, un gesto muy emotivo que demuestra una vez más la total identificación entre la afición y el equipo.
