El Ayuntamiento, por su parte, a través de diversos proyectos de construcción y rehabilitación, está creando nuevos desarrollos de viviendas sociales que buscan aliviar la presión sobre el mercado inmobiliario local
La crisis de la vivienda en España sigue agudizándose y, situación ante la que el Gobierno de Pedro Sánchez ha demostrado una vez más su incapacidad. A pesar de la creciente demanda de vivienda en la Costa del Sol, especialmente en Marbella, ni el Ejecutivo central ni la diputada por Málaga, Isabel Pérez, han tomado medidas efectivas para ofrecer soluciones inmediatas. La falta de incentivos para la construcción de viviendas asequibles o la liberación de las viviendas del SAREB sigue siendo una cuestión pendiente, y todo apunta a que la situación permanecerá estancada.
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Marbella ha dado un paso adelante, tomando la iniciativa para paliar la falta de viviendas asequibles. A través de diversos proyectos de construcción y rehabilitación, se están creando nuevos desarrollos de viviendas sociales que buscan aliviar la presión sobre el mercado inmobiliario local. Estos proyectos incluyen la construcción de varias promociones de viviendas de protección oficial en distintas zonas del municipio, con el objetivo de ofrecer a las familias locales y a los jóvenes marbellíes la posibilidad de acceder a un hogar digno. Además, el consistorio está trabajando en la rehabilitación de viviendas vacías, con el fin de que se puedan destinar a alquileres sociales. Sin embargo, la respuesta a nivel nacional sigue siendo escasa y poco resolutiva.
El Gobierno central, por su parte, ha mantenido una actitud pasiva ante esta problemática, sin aplicar medidas contundentes para liberar los activos del SAREB o para ofrecer incentivos claros a las constructoras y promotores para que se construyan más viviendas asequibles. La falta de compromiso de Pedro Sánchez y su equipo pone de manifiesto su desconexión con las necesidades reales de los ciudadanos de la Costa del Sol.
A la inacción del Ejecutivo se suma la postura de la diputada Isabel Pérez, quien, en lugar de ejercer presión sobre el Gobierno para que tome decisiones rápidas y eficaces, se ha mostrado totalmente ausente en la defensa de los intereses de Marbella y sus habitantes. Su silencio y falta de iniciativa no hacen más que agravar la situación, dejando a Marbella en una situación aún más delicada.
El Ayuntamiento de Marbella ha mostrado en estos últimos años un fuerte compromiso con la vivienda, demostrando que, cuando se actúa a nivel local, se pueden conseguir avances significativos. Sin embargo, es urgente que el Gobierno de España y sus representantes, como Isabel Pérez, dejen de mirar hacia otro lado y se impliquen de manera real y efectiva en la resolución de esta crisis que afecta a miles de familias de la Costa del Sol.
