El PSOE, a través de su portavoz municipal, José Bernal, prefiere que la ciudad pague al Gobierno de Pedro Sánchez los doce millones de euros que reclama la Tesorería General de la Seguridad Social, según afirman, porque prefieren ser constructivo y apuestan por pagar y luego reclamarlo “donde proceda”. A pesar de ello, el socialista asegura que apoyan “la defensa de que estos fondos se queden en Marbella” y culpan a la alcaldesa, Ángeles Muñoz, por haber cobrado un cheque de doce millones de euros ingresados en las cuentas de la ciudad.
Bernal se ha remitido al informe que ha enviado al Ayuntamiento la Tesorería General de la Seguridad Social donde se dice literalmente que “debe hacerse notar que la entrega de los 12 millones de euros, se produjo con anterioridad a la entrada en vigor de la reforma normativa producida por la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2018, con lo que en ningún caso podría ampararse en dicha reforma una hipotética negativa de este Ayuntamiento para poner a disposición de este Servicio Común el importe correspondiente a efecto de la cancelación del fraccionamiento concedido”. Un argumento, ante el que el Consistorio esgrimió, la primera vez que se reclamó la cantidad por parte de la Agencia Tributaria, que la liquidación de lo que debe ingresarse en las cuentas del Estado se determina a final de año, y estando vigente los actuales presupuestos generales del Estado para ese momento -ley que recoge la posibilidad de que Marbella destine el dinero de las multas y responsabilidad civil a equipamiento e inversión-, por ello con respecto a lo cobrado en 2018 la ciudad decidiría su futuro, a diferencia de lo que ocurrió en 2017, según explicó entonces la regidora.
No obstante, Bernal prefiere arremeter contra Muñoz culpándola de abocar al municipio “a un desastre y caos económico sin precedentes” y ha advertido de las consecuencias “irreparables” que tendrá la fotografía que quiso hacerse con la entrega de los 12 millones de euros días antes de la aprobación de Presupuestos del Estado para 2018. “En su afán desmedido por ocupar portadas de periódicos”, Muñoz se lanzó a “recoger un cheque de 12 millones” delante de todos los medios de comunicación, cuando “podría perfectamente haber esperado a la aprobación de los presupuestos, solo unos días después, en cuyo caso no se hubiera producido tal reclamación”.
