La subida de los precios de la energía, las materias primas y los materiales, sumados al desabastecimiento que está produciendo la huelga de transportista, está llevando a que algunas instalaciones, como la piscina Javier Mérida del Complejo Deportivo de Fuentenueva, echen el cierre, además están provocando malestar en diversos negocios que ven cada vez más paralizada su actividad y sin poder hacer frente a las subidas de precios. Mientas, continúa la inactividad del Gobierno, que sigue sin concretar medidas y que pospone el anuncio de estas hasta el próximo 29 de marzo, después del Consejo de Europa, y haciendo que los días sigan pasando mientras son los ciudadanos y trabajadores los que soportan el coste de la inacción de Pedro Sánchez y su equipo de Gobierno.
El sector de la construcción ya ha avanzado que el desarrollo de las obras, tanto públicas como privadas, podrían verse afectadas ante la imposibilidad de conseguir materiales como el cemento.
Por su parte, desde la hostelería, ya alertan de que la actual situación está amenazando con debilitar la viabilidad de los negocios ya que el sector está sufriendo de manera directa en su cuenta de resultados la subida de precios energéticos y de materias primas. Denuncian el incremento del IPC, que en febrero de este año ha llegado a situarse en España en el 7’6%, posicionando a España por encima de muchos países europeos, como Francia (4,1%) Portugal (4,4%) Alemania (5,5%) o Italia (6,2%) con la consecuente pérdida de competitividad frente a los mismos. Una situación que se está viendo agravada por el conflicto de Ucrania y por la huelga en el transporte.
También el sector pesquero ha dejado de faenar, esperando medidas que reduzcan sus costes y que les implique que salir a trabajar no los cueste dinero.
