Hoy me paro un momento a escribir la columna del periódico y me tengo que «DAR CUENTA» que el tema de hoy sí que es realmente importante y puede que hasta sientas que he escrito desde otra perspectiva. De hecho, mucho del contenido que hoy comparto por aquí contigo lo he estado volcando en redes sociales e internet.
La calma es un gran, gran tema y da para muchos ríos de tinta digital. Procuraré ser lo más escueta y precisa posible, allá voy.
La calma es un estado que todos anhelamos y que nos encanta experimentar diariamente.
Lo cierto es que el día a día y los agentes externos hacen que este «estado» sea a veces inaccesible para la gran mayoría de nosotros.
Si sueles perder los nervios con facilidad deberías empezar a «entrenar el estar en calma».
Y te estarás preguntando, pero, ¿cómo lo hago? Ok, nunca dije que fuera fácil pero no hay nada que se resista para todo aquel que tenga el anhelo de conseguirlo.
Lograr el estado de calma con facilidad es una habilidad emocional y se consigue a través de muchos caminos. Comenzando desde ti mismo, por supuesto.
Pon atención a esta lista de consejos que pueden ayudarte muchísimo.
1- Vigila tu sueño, debes dormir realmente el tiempo que necesitas, ni más, ni menos, un buen descanso es clave para mantenernos en estado de calma.
2- Haz ejercicio con regularidad, la lubricación ósea y muscular es fundamental para el riego sanguíneo y que este esté en continuo movimiento. El ejercicio también ayudará a liberar oxitocina desde el cerebro que irá directamente a tu corazón y afectará completamente a todo tu cuerpo.
3- NO TODO DEPENDE DE TI, piensa que no eres imprescindible y que si tú eres la que siempre lleva todo adelante le estas quitando a otros da oportunidad de aprender y superarse a sí mismos.
4- Controla lo que esté bajo tu control, lo demás no. Esto te quitará de ansiedad y de estados de ánimos desesperados que si se acumulan pueden desencadenar estados de salud perjudiciales para ti.
5- No acumules muchas cosas para hacer. Organízate planifica, pero no te vuelvas loca, todos los días HAZ, pero no abarques más de lo que puedes porque sino a la larga el estrés te llevará a soltar todo de igual forma que lo has cogido.
6- Haz una rutina matutina que sea inquebrantable. Esto es lo más complicado, pero créeme que es la base donde todo el día se podrá apoyar y salir adelante. Meditar cinco minutos, darte una ducha matutina con agua fresca, cuidar tu aspecto con mimo, hacer algo de estiramientos apenas salgas de la cama te ayudará muchísimo. La rutina matutina puede que dure apenas 20 o 30 minutos, pero hacerla diariamente te ayudará a ser más consecuente con todas las demás tareas del día.
7- Vive en el presente y no te enfoques en aquello que pasó o qué pasará. Todos los días son importantes, pero este de hoy es más que ningún otro.
Espero ayudarte y deseo verte pronto por aquí con más contenido, si estás leyendo, TE AMOOOOO.
