El próximo 25 de noviembre el artista local, Juan Delola, cierra su gira ‘Noche Andaluza: Homenaje al Rock Andaluz’, un espectáculo que sigue cosechando éxito y que cerrará este año de conciertos en su tierra natal, donde pese a las dificultades para encontrar espacio ha optado por la autoproducción para poder acabar en Marbella y encontrarse así con su público más cercano.
En una semana cierras la gira, ¿qué ha supuesto para ti este espectáculo?
Ante todo, una satisfacción personal por saber que un espectáculo con este contenido tiene salida hoy día. Se trata de hacer música que no está de actualidad, que es de la catalogada no comercial y para un público muy determinado y la sorpresa es que el espectáculo ha gustado muchísimo. Además, ha servido para que el público aprenda de la historia de la música andaluza, contamos la historia de un tipo muy significativo de música en Andalucía como fue el rock andaluz
¿Por qué esa apuesta por el rock andaluz que no es tan comercial?
Siempre he sido un enamorado de la música de Triana y en general del rock andaluz, era una música de la que ‘mamaba’ mucha gente, de la que se hablaba y vi que hay un calado que está ahí y que no había un espectáculo que lo homenajeara y que te hiciera revivir una época. Uno de mis objetivos era poder homenajear una música de la que todavía se bebe.
¿Un homenaje o un tributo al rock andaluz?
El espectáculo no es un tributo, un tributo es quien lo quiere copiar y copia los arreglos, los componentes en la escena… Nosotros lo que hacemos es una adaptación de los temas, es un homenaje de mí hacia esta música. Yo cambio acordes, melodías, instrumentos… al final lo hago mío y eso me quita también el gusanillo de componer. En la zona no hay grupos de la homenajeen y otro de mis objetivos fue ese, que Marbella también tuviese un espectáculo de ese tipo. Que no fuese un grupo más que hace lo mismo.
¿Qué tiene Juan Delola de rock andaluz?
Esa fusión de la música andaluza, flamenco, copla, incluso una música andalusí y una parte de rock progresivo de los setenta. Grupos que fusionan esas dos cosas, a mí me llegan más que otra música.
¿Con qué momento de la gira te quedarías?
El mejor, porque fue una sorpresa, fue el concierto que hicimos hace un mes en un pueblo de Navarra. Actuar tan lejos, una comunidad que, en teoría, no tiene que ver con la andaluza, pues el teatro se llenó y se quedó gente fuera. Otro que también fue muy bueno fue en Monda, eran las tres de la mañana y al día siguiente era laborable y el ambiente en la plaza nos sorprendió mucho.
¿Y cuál ha sido el peor?
Unos pocos -bromea-. Un momento malo fue en un concierto que se nos estropeo la furgoneta antes de llegar a Córdoba, eran las 9 de la noche, tocábamos a las 10 y no había manera de llegar, estábamos tirados en una gasolinera. Al final, llamando, conseguimos dos vehículos que nos llevaron y después ya volvimos con la grúa hasta Marbella. ¡Qué peliculón!
¿Cómo termina la gira con tristeza porque se acaba o alegría porque terminas en tu tierra?
Una mezcla de las dos cosas, cuando algo funciona y uno está a gusto pues no queremos que se acabe. Acabar en Marbella no estaba previsto. Nosotros todos los conciertos son en teatros, auditorios, casetas municipales y en Marbella no hay ahora mismo posibilidades, pero, aunque sea en un sitio más pequeño, hemos decidido hacerlo en sala Premiere Club, nos apetecía mucho tocar en Marbella, aunque este espectáculo no está diseñado para un sitio tan pequeño.
¿Y qué esperas de ese concierto?
Encontrarnos con amigos y echar una noche guay, que hay mucha gente que tiene ganas de vernos. Hace ya tres años que no tocamos en Marbella, tocamos en San Pedro, pero en Marbella no.
Es un concierto autoproducido, ¿no?
Sí, es el único concierto de toda la gira que hacemos autoproducido, por eso hay entradas, para poder asumir el caché de la banda, pero son más las ganas de tocar en Marbella, aunque sea autoproducido y en una sala pequeña para la que no está preparado el espectáculo. Podían las ganas de tocar aquí.
¿Juan Delola de Anhelo o de Noche Andaluza?
Desde que saqué el primer disco han pasado 15 años y siempre quedan los comienzos, pero sí que he evolucionado y me he ido por otras ramas. Fue un paso el decir: dejo de apostar por mi música y apuesto por otra cosa. Pero el rock andaluz lo siento tan mío que lo defiendo como si así lo fuera.
Y, ¿qué esperamos en un futuro?
Tenemos algunos proyectos de sacar alguna composición. Pero el año que viene seguiremos con este espectáculo. Son cuatro o cinco años con el espectáculo girando y cada vez trabajamos más. El primer año fueron 10 conciertos y este año hemos hecho 35. Le llega a la gente y eso te da mucha energía para seguir.
