Con la vuelta al colegio cada vez más cerca, la preocupación de los padres y madres del Colegio Miguel Hernández, que cuenta con un módulo cerrado por riesgo de derrumbe, es saber dónde estudiarán sus hijos el próximo curso. Un problema ante el que la Tenencia de Alcaldía de San Pedro Alcántara se afana en dar solución, remitiendo a la Junta de Andalucía tres posibles soluciones “a corto plazo”, según ha señalado el Teniente de Alcalde sampedreño, Javier García.
“Barajamos con la Junta varias posibilidades, la utilización de aulas prefabricadas, el acondicionar o construir dos aulas nuevas dentro del espacio del colegio y, en tercer lugar, adecuar la zona en la que están para solucionar los problemas de estos espacios”, explicó García, quien precisó que la comunicación con la Delegación Provincial de Educación es constante. Unas soluciones con las que, en todo caso, correrá el ayuntamiento con el fin de agilizar cualquier trámite.
Más allá del inicio del curso, la gravedad del asunto hace que se esté trabajando de forma paralela en dar respuesta al cierre de dicho módulo, buscando “una solución definitiva” que se sustentará sobre el informe que la Tenencia va a encargar a una empresa especializada en estructuras para que identifique “las patologías que tiene el colegio”. “Vamos a encargar un análisis estructural para que la Junta no tenga ninguna excusa”, precisó el responsable municipal.
En relación con esa posible solución definitiva, el propio García reconoció que son actuaciones “costosas” y precisó que “existe la posibilidad de que arreglen toda la estructura del módulo, pero nosotros consideramos que eso puede ser igual o más costoso que un nuevo centro educativo”.
