La noche de debate electoral nos dejó una clara división de dos bloques, y no sólo por las materias a tratar, que también, sino por las visibles coincidencias existentes entre varios de los partidos allí presentes frente al discurso de la “gestión” y “transformación” de sus ocho años de Gobierno defendido por la candidata de los populares , Ángeles Muñoz, quien definió el debate como un “nueve contra uno”.
El propio candidato de la Plataforma Costa del Sol Sí Puede- Marbella, José Carlos Núñez, reconocía, en su alegato final, haber encontrado “puntos en común entre muchos partidos”, si bien, mayoritariamente, todos estos aspectos en común estaban basadas en las disidencias de opinión respecto a Ángeles Muñoz, y el hermanamiento entre sus propuestas, lo que vislumbra las posibilidades de llegar a acuerdos entre estas formaciones. Planes de movilidad, seguridad, limpieza, incluso la administración sampedreña, fueron puntos en los que se mostraron comunes varios partidos.
Tanto la formación de Díaz, como la de Núñez, así como la del líder del partido sampedreño, Rafael Piña, coincidían en uno de los postulados clásicos defendidos desde las ideologías de izquierda, las críticas a la externalización, al desempeño de determinadas actividades del municipio por parte de empresas y la defensa del intervencionismo municipal.
Igualmente, José Bernal quiso centrar sus críticas en una sola línea, Ángeles Muñoz, no haciendo ninguna referencia al resto de partidos, situación quizás relacionada con el hecho de la necesidad que pueda tener de pactar con ellos en un futuro.
Numerosas son las voces que claman sobre un posible pacto entre PSOE, OSP, IU y PODEMOS, pese a que estas formaciones lo niegan, la realidad de las encuestas deja ver esta situación, y viendo las posturas defendidas en el debate, se pone de relevancia las líneas paralelas a seguir.
Líneas paralelas frente a Muñoz, quien se defendía poniendo como ejemplo la recuperación y normalización del Ayuntamiento, “hemos tenido un Gobierno sólido, solvente, que ha invertido y que ha recuperado la confianza”, argumentaba Muñoz en su defensa.
