Dolor y fervor en la noche del Lunes Santo de Marbella con la salida procesional del Santo Cristo Atado a la Columna y María Santísima Virgen Blanca por el Barrio Alto. Pasadas las 20:30 horas las puertas de la Ermita del Santo Cristo se abrían y comenzaba a salir el amplio cortejo que acompañaba a ambos tronos, casi medio millar entre los de la sección del Cristo y el de la Virgen, los del primero con túnicas verdes y capirotes y cíngulos blancos, los segundos a la inversa, túnicas blancas y capirotes y cíngulos verdes.
Abre el cortejo la sección de tambores de Algatocín, tras ellos, el trono de La Columna acompañado por la música de la Agrupación Musical de Marbella, que se ha estrenado hoy en la Semana Santa de Marbella 2019. Apenas se habían recorrido unos metros cuando había que realizar la primera parada en calle Ancha para cantarle al Cristo dos saetas, la emoción inunda ya el Barrio Alto. Mismo proceder con la Virgen Blanca, a la que a la conclusión de los cantos comienzan los primeros vivas.
Paso tranquilo y sereno para que marbellíes y visitantes, que han vuelto a copar las calles de la ciudad, adoren a un Cristo doloroso y sufridor por los azotes, y veneren la pureza de su madre que lo acompaña. El cortejo sigue por Puente Ronda y las calles Remedios, Virgen de los Dolores, Ortiz de Molinillo, Carmen y a la plaza de la Iglesia para hacer Estación de Penitencia en la Encarnación.
Tras el paso por el templo prosigue el recorrido por Trinidad, Salinas, Arte y Portada, antes de entrar por calle Lobata, cuya extensión parece multiplicarse con las numerosas saetas que se cantan a los Sagrados Titulares. Pasaban las once y media de la noche cuando el Cristo giraba en calle Atarazana, en otro momento culmen y digno de admiración por la estrechez del recodo, media hora después llegaba a este punto la Virgen Blanca.
Rigurosidad y perfección de los hombres de trono en el paso por Atarazana para ir esquivando farolas que casi rozan con la Corona de la Virgen. El cortejo afronta ya la recta final de su recorrido. Calle Postigo, Salvador Rueda, San Francisco, Leganitos, Aduar, Peral, Puente Ronda y llegada a calle Ancha, donde la Virgen Blanca y el Cristo de la Columna, se miran por última vez frente a frente en un emotivo encuentro antes de recogerse en su templo.
