El concejal de Seguridad, José Eduardo Díaz, ha realizado un balance del desarrollo de la Semana Santa en la ciudad, confirmando que, en el período comprendido entre el 26 de marzo y el 4 de abril, se han levantado, por parte del cuerpo municipal de Policía, un total de 387 actas de distinto tipo relacionadas con el toque de queda, el uso de las mascarillas o el cierre perimetral.
El edil ha subrayado que el dispositivo, formado por más de 250 efectivos de Policía Local, Policía Nacional, Bomberos y Protección Civil, “ha sido eficaz y nos ha permitido disfrutar de unos días de devoción y ocio sin incidencias destacables”.
Con respecto al operativo, Protección Civil, que ha contado con 40 voluntarios, ha desarrollado un total de 60 servicios durante 370 horas, centrándose principalmente en el control de accesos a templos y espacios de culto del municipio y al seguimiento de las normas de seguridad frente al Covid-19.
Por su parte, el servicio de Prevención de Incendios y Salvamento del Ayuntamiento colaboró en un rescate en la playa de Cabopino, además de realizar otras actuaciones como la llevaba a cabo en un conato de incendio en la cocina de un restaurante de la urbanización de La Montúa.
“Estos datos reflejan que hemos disfrutado de una semana tranquila, en la que los ciudadanos han elegido libremente si querían pasar su tiempo en la playa, consumiendo en un bar o participando en los actos programados por las diferentes cofradías”, ha apuntado Díaz.
En este sentido, ha resaltado la labor tanto de las agrupaciones religiosas como de la delegación de Fiestas para garantizar en todo momento la seguridad de la programación que se ha desarrollado durante la Semana de Pasión. “Ha sido un trabajo intenso pero que ha dado sus frutos”, ha manifestado el concejal, quien ha recalcado “la responsabilidad demostrada por la mayoría de los ciudadanos”.
